Viene de aquí:
El primer bombardero en picado en
llegar a España no fue un Junkers Ju-87, sino un Heinkel 51 G biplano, que
llegó al aeródromo de Tablada en Sevilla en octubre de 1936.
Pero este Heinkel se fue tan secretamente
como llego, ya que sus pruebas en las cercanías del aeródromo no impresionaron
a nadie, y nunca fue usado en operaciones sobre el campo de batalla, volviendo
rápidamente a Alemania.
Heinkel 51.
En noviembre de 1936 salían de la
factoría Junkers en Alemania las primeras unidades de la primera serie de
pre-producción de Ju-87 – A, y en enero de 1937, cuatro unidades de este modelo
llegaban al puerto de Vigo, siendo enviado el fuselaje por carretera y el resto de las piezas por
ferrocarril al aeródromo leones de la Cenia,
en donde se ensamblaba el aparato.
Llegada al puerto de Vigo.
Transporte del fuselaje por carretera.
El resto del aparato,por via ferrea.
Comienza el ensamblaje.
Tras el ensamblaje de las cuatro unidades
de Ju-87, fueron enviadas al aeródromo de Calamocha y asignadas provisionalmente
al grupo de caza (Jadgruppe) J/88,
probándose en los cielos del frente del norte, aunque de manera limitada, ya
que el propósito de la unidad era básicamente experimental. A finales de
julio,el grupo J/88 recibía aparatos Arado Ar
68, más adecuados para actuar como caza, y los aparatos Ju-87 eran
reasignados al grupo de bombarderos
(Kampgruppe) K/88,una unidad mucho más adecuada para las capacidades
del Ju-87.
Se trató de mantener en el máximo
secreto la presencia de los ju-87 en España, y al grupo de estos 4 primeros aparatos se le denominó Stuka 88,una
unidad experimental que incluía apenas 15 personas, aparte de los tres pilotos y los tres operadores de radio-artilleros ; 3 mecanicos, dos especialistas en armas,
un especialista en fuselaje, un ingeniero de motores, un supervisor, un intérprete
y dos pilotos civiles “invitados” por la
fabrica Junkers,dos pilotos de la fábrica Henschel ,que deseaba introducirse en
la cuestión del bombardeo en picado.
(Un interesante desarrollo de
este modelo fue el denominado Junkers Ju- 87 C, de alas abatibles,especialmente
desarrollado para formar parte del grupo aéreo de combate del portaaviones Graf Zeppelin como avion torpedero.Los planes de construcción del portaaviones se habian desarrollado a
expensas de la Luftwaffe, que había mostrado muy poco entusiasmo por el proyecto.
La construcción había empezado en 1936, y el Graf Zeppelín fue puesto sobre el agua en diciembre de 1938, aunque nunca se termino de construir.
Junkers Ju-87 C.
En el frente del norte, el recién
llegado Stuka iba a enfrentarse con un aparato que la fuerza aérea soviética había
puesto en servicio apenas un par de meses antes, y que sobre los cielos de
España iba a desarrollar y probar sus capacidades.
Se trataba del bombardero bimotor Tupolev Sb-2 “Katiuska”, de una velocidad muy superior a la del propio stuka o
cualquier caza alemán o italiano de la epoca, lo que obligaba a estos a usar una técnica
novedosa: Se establecían patrullas de caza que volaban a más de 5000 metros.
Cuando se divisaba un Tupolev en misión de bombardeo o reconocimiento, los
aviones de caza nacionalistas se lanzaban en picado desde esa altitud para tomarlo por sorpresa Esa era
la unica manera en la que podían adquirir el impulso suficiente para igualar en
velocidad por solo unos segundos al Tupolev, que si lograba escapar del
primer intento de ataque, ponía sus
motores a la máxima potencia y se convertía en inalcanzable para cualquier avión
que los nacionalistas poseían en aquel momento.
Escuadrilla de Tupolev SB-2 en el aerodromo de Barajas,en abril de 1939.
Las operaciones en las que el Ju-87 participo durante la guerra civil española son menos conocidas que las
que llevaron a cabo los cazas o bombarderos de la Legión Condor, aunque algunos
datos, fechas y objetivos son bien conocidos:
La primera operación de combate
que llevaron a cabo los stukas fue el 6 de marzo de 1938, cuando atacaron el
puente sobre el Ebro en la localidad de Sastago, objetivo que repetirían al día siguiente,
aunque sin éxito. El día 8 del mismo mes lanzaron bombas de 500 kilogramos
sobre la estación de ferrocarril de Puebla de Hijar, logrando cortar momentáneamente
la línea férrea que unía Zaragoza con Alcañiz.
Los dias siguientes se continuó con ataques sobre concentraciones de
tropas republicanas en Azuara, Aguilón y Belchite ,y sobre la linea defensiva republicana
a 6 kilómetros al oeste de Belchite.
En julio de 1938, la unidad
recibió la orden de dedicarse en exclusiva al frente del Ebro, donde la ofensiva republicana amenazaba con romper las líneas nacionalistas y lograr su
objetivo estratégico de dividir la zona nacionalista en dos.
Para ello, la unidad recibió dos
nuevo aparatos, con lo que la unidad paso a operar en grupos de tres aparatos, y
no en parejas como anteriormente había hecho.
El 27 de julio, los Ju-87 comenzaron
sus operaciones en el frente del Ebro atacando concentraciones de tropas en Vall de Uxo, Torralba y búnkeres en la sierra de Espadan.En los siguientes días la unidad se concentró en atacar los
cruces de carreteras en Rasquera, Venta de Camposinos (atacado cuatro veces
durante cuatro días consecutivos) y el puente sobre el Ebro en Ginestar, que
fue destruido con un impacto directo.
Corbera,Ascó y el puente de Vinebre fueron los objetivos de los siguientes días.Posiciones antiaéreas
republicanas al este de Tortosa y el túnel de Mora la Nueva, dañado en su
entrada sur el 1 de agosto y en su entrada norte al día siguiente.
Posiciones artilleras en Fatarrella,batallones de la reserva republicana en Pinell, y cuatro pasarelas provisionales construidas sobre el rio Ebro al norte de Benifallet, fueron los
objetivos más importantes de los stukas entre mediados y finales de agosto de
1938.
En octubre de 1938 llegaron a España 5 de los nuevos aparatos Ju 87 B, que se
integraron en el grupo de bombardeo K/88
con base en Zaragoza. Esta nueva unidad estaba compuesta de 33 hombres : 5
pilotos,3 artilleros,9 mecanicos,un especialista en motores,2 especialistas en radio,
un electricista, cuatro conductores, un interprete,2 mecanógrafos y 3 oficiales
encargados de valorar la experiencia y los resultados obtenidos por los
bombarderos en picado en las pasadas y futuras operaciones.
En general se habían obtenido buenos
resultados, con un error promedio de entre 5 a 10 metros al blanco, que si bien era
mucho mejor que el obtenido con bombardeos convencionales, aun estaba lejos del ideal,
sobre todo si se atacaba contra tanques o posiciones artilleras, que
necesitaban de impactos directos para ser puestos fuera de combate.
El principal problema era la
falta de potencia del aparato, lo que limitaba su carga útil a una bomba de 250
kilos cuando se utilizaba el modelo de dos asientos piloto-artilleros.Cuando solo se utilizaba
el piloto y se prescindía del artillero,la carga útil se podía elevar a una bomba
de 500 kilos.
Proyectiles de 500 y 250 kilogramos.
Tras el fin de la batalla del Ebro
en noviembre de 1938, los stukas fueron dedicados al ataque de los puertos del
Mediterráneo que aun permanecían en poder republicano: el 15 de enero fue
atacado el puerto de Tarragona durante todo el dia, hundiendo tres cargueros.
Los siguientes días se atacarían los almacenes del puerto de Barcelona.
Imagen de reconocimiento del puerto de Barcelona de finales de enero de 1939.Objetivos marcados con el 1,almacenes y depositos; con el 2,buques petroleros ; con el 3,buques de carga,y con el 4 ,transportes de personal.
A partir de mediados de marzo
,parte de la unidad fue enviada a tomar parte en los combates que se llevaron cabo en las cercanias de Guadalajara, en las últimas
jornadas de la guerra; puente en Meco, nudo ferroviario en Arganda, posiciones artilleras republicanas al suroeste de Titulcia,etc.
El 27 de marzo los Ju-87 stuka
realizaban su ultima misión de combate, bombardeando y cortando las carreteras
que circundaban la poblacion de Arges, en
las cercanías de Toledo.A partir de entonces, la resistencia republicana se
derrumbó con rapidez, y los Ju-87 se permitieron la libertad de realizar vuelos
de exhibición sobre los cielos de la capital, sin ninguna oposición.
Las enseñanzas adquiridas por los
bombarderos en picado Ju-87 en la guerra civil española no dejaban lugar a la duda:
media docena de stukas, armados cada uno con una sola bomba de 250 o 500 kilos,
daban mejor resultado que una escuadrilla completa de bombarderos horizontales.
Cuando acabó el conflicto español,Von Richtoffen,comandante en jefe de la Legion Condor se había convertido en un entusiasta del bombardeo en pciado,y el
concepto de blitzkrieg ,una guerra relámpago a base de extrema movilidad, con
los bombarderos en picado actuando como artillería de muy largo alcance para
atacar objetivos clave en territorio enemigo con altísima precisión ( cruces de
carreteras,posiciones artilleras,vías ferreas,etc ),siempre a expensas de lo
que necesitaran las unidades blindadas, se había hecho realidad.
Hitler stuka squadrons,Ju-87 at war 1936-1945 – John
Ward
Condor, the Luftwaffe in Spain – Patrick Laureau.
Legion Condor 1936-1939, eine illustrierte
documentation – Karl Ries
(Continuara...)
(Continuara...)