Ruinas de Canope.
Viene de aquí:
La batalla de Canope (o Canopus)
se desarrollo en las cercanías de las ruinas romanas del mismo
nombre, practicamente en el mismo sitio en donde se había disputado la anterior
batalla en Mandara, una estrecha lengua de tierra ente la costa mediterránea y
el lago seco de Mareotis.
Al tener informes de la llegada de las tropas de Menou desde el Cairo a reforzar a las tropas de Alejandría
de Friant y reynier, los británicos decidieron mantenerse momentáneamente a la defensiva,
y habían construido varios reductos, el más importante de ellos situado junto a
la costa, justo sobre las ruinas romanas de Canope,semisumergidas en el mediterraneo.
La intención de Menou era
acercarse y atacar la línea defensiva británica de noche. Contaba con unos 15.000
hombres divididos en tres grupos principales. Al oeste, el grupo de Reynier,formado por 5 semi-brigadas,al este
el grupo de Lanusse formado por 4 semibrigadas y en el centro el grupo del general Rampon con tres semibrigadas.Los 1.200
jinetes que formaban la caballería "pesada" francesa
al mando del general Roize permanecían en la retaguardia.Serian los encargados
de cargar frontalmente contra la línea britanica cuando fuera necesario,mientras que por el este se
produciría un ataque de diversión por la caballeria del general Bron ( húsares y
chasseurs ),y el regimiento de dromedarios.
Husar.
Chasseur.
A eso de las 3 de la mañana del 21 de marzo
comenzó el avance de las tropas francesas, en absoluto silencio, hasta llegar a
sus posiciones previas al asalto. Pero la oscuridad provocó que algunas
unidades se extraviaran,otras cambiaran de dirección y otras se apelotonaran unas
contra otras.
Pero los problemas no impidieron que el ataque comenzara a la hora prevista,las 3:30, cuando los regimientos de
dromedarios y la caballería ligera de Bron lograron mantener ocupado al flanco
izquierdo britanico.En el flanco opuesto, las tropas de Lanusse y Rampon atacaban
el reducto británico en las ruinas de Canope.
El ataque frances sobre el reducto de Canope.
Al amanecer, la lucha continuaba
en torno a las ruinas, y las tropas de Lanousse estaban apunto de superar las defensas britanicas cuando fueron contraatacados
a la bayoneta por el regimiento 42º Black Watch y el
regimiento 23º de los fusileros de Gales.
Lanousse murió allí, y la
semibrigada de Reynier y lo que quedaba de la semibrigada de Rampon atacaron el
sector central de las defensas britanicas, con poco éxito.
La batalla se encontraba en un
empate técnico, nadie progresaba, y un dubitativo Menou decidió ordenar a Roize que cargara con su caballería
para tratar de romper definitivamente la línea británica.
Al principio Roize se negó,
pensaba que una carga frontal era un suicidio, pero al final acató la orden y
cargó.
Su ataque frontal tuvo un éxito
efímero, desmantelando y haciendo huir a varias unidades británicas de la primera inea.Pero el general Roize cayó muerto junto a las ruinas de Canope, y
sus hombres se retiraron.
Hacia las 10 de la mañana, las tropas
francesas empezaban la retirada general hacia Alejandria.Al no poder expulsar de
nuevo hacia el mar a los britanicos,practicamente habían perdido Egipto ese
mismo día.
El general Abercrombie no pudo
disfrutar de la victoria, ya que había sido herido en una pierna a primera hora
de la amñana, siendo trasladado al hospital de campaña britanico.Pero había perdido
mucha sangre, y murió pocos días después.
Tras la batalla de Canope,Menou y
el resto de generales franceses se enzarzaron en una serie de acusaciones mutuas
y todo tipo de improperios, en vez de preparar la defensa de Alejandria.Los británicos
continuaron con sus operaciones ofensivas,y el 13 de abril rompian los diques que contenian los lagos que
rodeaban Alejandria,inundando los caminos y cortando así la comunicacion de la ciudad con el exterior. EL 10 de mayo,
los franceses perdían la estratégica ciudad de Ramanieh, quedando así dividido
el territorio que aun controlaban en Egipto, con Belliard en el Cairo y Menou en
Alejandría.
Belliard rendía el Cairo el 27 de
junio, mientras Menou resistía hasta el 30 de agosto, esperando que llegaran
los refuerzos prometidos desde París.
Pero los refuerzos nunca llegaron.El encargado de llevar las tropas de refuerzo desde Francia a Egipto,
el almirante Ganteaume, lo intentó en tres ocasiones, pero fracasó las tres, unas
veces por la mala mar, el mal tiempo, averías en los barcos, epidemias, y,
sobre todo, falta de decisión para llevar a cabo la tarea.
En vez de llegar los refuerzos prometidos,
desembarcaron un grupo de comediantes,
actrices y artista de todo tipo, enviados hacia un par de meses por Napoleón
para disfrute de la guarnición francesa de Alejandría ,que habían estado
esperando en el puerto, y que Menou se había negado a dejar que desembarcaran.
Fue el tragicómico final del
Armee d´Orient, el ejercito de oriente que tenía como objetivo final llegar a la India y terminar con el dominio británico en oriente.Finalmente, los supervivientes del ejercito de oriente embarcaron en buques ingleses y fueron repatriados a Francia, acompañados por el féretro del general Kleber.
Era el mismo destino que ya habían
acordado algunos generales franceses meses atrás, tras firmar el Convenio de El Arisch, y que algunos políticos franceses de París se habían negado a firmar.
La aventura egipcia había costado
a la nueva republica francesa la vida de 3.000 de sus soldados en los campos de batalla
y de otros 2.000 por enfermedades.3500 habían sido hechos prisioneros en batalla, y 14.000 se habian rendido en el Cairo y 10.000 en Alejandria (incluyendo
heridos).
Lo único positivo para Francia es
que la derrota en Egipto impulsó a Gran Bretaña, ya sin preocupaciones sobre la
sostenibilidad de su imperio en oriente,
a sentarse a la mesa de negociaciones. Y a principios de 1802, se firmaba la
paz de Amiens, que daba fin a las guerras revolucionarias y a la Segunda Coalicion,y llevaba la paz a Europa.
Pero,esta vez, tampoco la paz iba a durar mucho.
Tras la firma de la paz de Amiens,el primer beso en diez años entre Francia y Gran Bretaña (caricatura inglesa ).
The encyclopedy of the French revolutionary and
Napoleonic wars – Gregory Fremont Barnes
The campaigns of Napoleon – David g. Chandler
Imperial bayonets – George Nafziger.