viernes, 31 de marzo de 2023

1956: Insurrección en Budapest ( 7ª parte )

 

Manifestantes polacos en Poznan, 1956.

Viene de aquí:

  El 23 de octubre de 1956, el ministro chino de asuntos exteriores, recibía en su despacho oficial en Beijing un telegrama del embajador de la Republica Popular China en Budapest:

  “Esta tarde, los estudiantes universitarios de Budapest han organizado una manifestación en apoyo de los sucesos en Polonia. Miles de manifestantes han gritado slogans como independencia, libertad, democracia”.

  Los sucesos de Polonia a los que se refería el embajador chino habían comenzado a mediados de año. A finales de junio, se habían producido fuertes disturbios en Poznan, al oeste de Polonia. Aunque los disturbios habían sido reprimidos eficazmente por las tropas soviéticas en Polonia, algunos de los líderes del partido comunista polaco  habían quedado profundamente preocupados

  La facción reformista del PCP había propuesto a Vladislav Gomulka como líder del partido el 19 de octubre, saliendo elegido. Eso iba a ser un serio problema para los líderes soviéticos en Moscú, ya que Gomulka había sido expulsado del partido por su “desviacionismo derechista” en 1951, y había pasado 3 años en prisión hasta que fue liberado gracias a la desestalinizacion del bloque del este tras la muerte de Stalin.

Gomulka hablando a la multitud, tras haber sido elegido secretario general del PCP.
 

  El programa “reformista” de Gomulka incluía la expulsion de  varios miembros del politburó polaco, entre ellos el ministro de defensa , el mariscal Rokossovsky, el garante de la presencia soviética en Polonia tras el final de  la 2º guerra mundial.

  Tras la elección  de Gomulka como secretario general del partido, Kruschev ordeno a sus tropas rodear Varsovia. Despues, acompañado de buena parte de su gobierno, voló hasta la capital polaca para confrontar a los lideres polacos.

  Tras dos días de tensas conversaciones, soviéticos y polacos alcanzaron un principio de acuerdo. A cambio de  garantías por parte de los reformistas polacos que sus reformas no afectarían  a la presencia soviética en Polonia o a la unidad del bloque soviético, Kruschev ordenaba al retirada de sus tropas a sus bases y acepto a Gomulka como líder polaco y la implementacion de  la mayoría de sus políticas.

Rokossovsky y Zhukov, mariscales de la URSS.
 

  Las noticias de lo ocurrido en Polonia tuvieron un efecto impulsor en Hungría; los dos países habían estado unidos durante muchos años, y lo que parecia un éxito de los polacos habiéndose enfrentado a los soviéticos había hecho crecer la esperanza en Hungría de que algo similar podía pasar allí.

  El 22 de octubre, una masa de entre 4 y 5.000 estudiantes de la facultad de Tecnología de la Universidad de Budapest se concentró  en asamblea durante más de 11 horas. Era el principio de  un nuevo año académico, y el primer punto a discutir del orden del día era decidir si la facultad seguía perteneciendo al DISZ (la organización juvenil comunista) o formar su propia organización.

 

  En 1956, cualquier estudiante húngaro de 18 años había sido educado bajo el sistema comunista durante todo su periodo escolar, y aunque los estudiantes universitarios eran considerados como la élite del sistema comunista húngaro, los estudiantes húngaros compartían al 100 por 100 las inquietudes del resto de la población húngara, y votaron masivamente  para abandonar  DISZ.

  La asamblea continuo con la discusion de  otros puntos más “terrenales”, como el precio de los libros de texto y la escasa calidad de la comida y el alojamiento en la universidad, convocandose ademas una manifestacion para esa misma tarde.

  La asamblea estaba a punto de  finalizar cuando alguien pregunto si lo que había pasado con Gomulka en Polonia podría extrapolarse a Hungría, y si eso podría significa un cambio real.

  Otro asistente, cuyo nombre permanece en el anonimato, se  envalentono y sugirió a la asamblea que todos deberían poner en común y crear un programa para llevar la democracia plena a Hungría, para después presentarlo al gobierno.

  El programa que empezó a redactar la asamblea incluía la exigencia de la retirada de las tropas soviéticas en Hungría, ya que su sola presencia convertía el deseo de democracia en algo inalcanzable.

  Los diez puntos originales del documento cabían en un folio, pero apenas un par de horas después, habían crecido hasta 16 puntos.

  Con la esperanza de poder radiar su manifiesto, una delegación de estudiantes marcho hacia una emisora de radio en Budapest. Pero el censor de la emisora se negó a la emision de  algunos de los 16 puntos.

  Marcharon entonces  a la sede del periódico oficial del DISZ,Szabad Ifjusag (Juventud libre), donde el editor ofreció todo su apoyo al manifiesto, pero declino publicarlo, ya que temía por su seguridad si lo hacia.

 

 Finalmente, los estudiantes decidieron utilizar los pocos medios de los que disponían para publicar el manifiesto. Uno de ellos fue el periodico universitario Jove Menoke (ingenieros del futuro).Se consiguieron fotocopiar  2000 copias en la propia universidad, y otros cientos de copias fueron mecanografiadas por las secretarias de la universidad.

  La mañana del día 23, el presidente Arno Gero volvía a Budapest tras su entrevista con el mariscal Tito  en Yugoslavia. Decidio terminar con la “revuelta” estudiantil simplemente prohibiendo cualquier tipo de manifestación publica en las calles de Budapest.

  Pero finalmente decidió autorizar la manifestación, influido seguramente por rumores que indicaban que la policía no estaba dispuesta a usar la fuerza contra los manifestantes.

  La manifestación dio comienzo a las 3 de la tarde. Alrededor de 12.000 asistentes salieron de la Universidad Metropolitana, en el distrito de Pest, en dirección  al memorial a  Jozsef Bem, un héroe de la revolución de 1848 contra los austriacos nacido en Polonia, en donde se reunirían con los miembros de la asociación de escritores húngaros, que iban a leer un manifiesto de apoyo a los reformistas polacos.

Memorial a Jozsef Bem.
 

  Los manifestantes comenzaron la marcha con cantos y pancartas con mensajes moderados, pero según se iban añadiendo más manifestantes, la confianza aumento, y los mensajes se fueron radicalizando.

  Desde el distrito de Buda, donde se ubicaba la Universidad Tecnológica, salieron otros 8.000 manifestantes. Fue allí en donde apareció el primer símbolo de la inminente insurrección : una bandera tricolor húngara, con el rojo, blanco y verde, con un agujero en medio donde el típico símbolo de la hoz y el martillo había sido recortado, vista por primera vez en lo que hoy es la plaza del Papa Juan Pablo II.

 

  A las 4 y media de la tarde, mas de 25.000 personas se habian reunido en la plaza Bem, pero nadie sabía que hacer a continuacion. Algunos sugirieron marchar hacia el Parlamento, y la idea fue aprobada por aclamación popular.La ruta hacia el parlamento pasaba por algunos de  los barrios residenciales más populosos, y miles de personas se unieron a la manifestacion.Y los canticos se habian reducido  a uno solo, Ruskik haza!

 

Manifestantes discurriendo por el bulevar Erszebet.
 

   A las 5, el preocupado presidente Gero llamaba a Yury Andropov, el embajador soviético en Budapest. Andropov también estaba preocupado, sobre todo cuando Gero le solicito  tropas soviéticas para reprimir a los manifestantes. Gero telefoneo también al agregado militar soviético en Budapest con la misma petición.

  Ambos rusos dijeron que intentarían persuadir a las autoridades de Moscú .En pocos minutos, Kruschev llamaba a Gero para preguntarle  cual era la gravedad de la situación. Gero contesto que la situación era seria. Kruschev llamo a Andropov y le hizo la misma pregunta. Después llamo al ministro de defensa soviético, el mariscal Zhukov.

  Aunque Kruschev dijo que el asunto debía ser decidido por el Politburó de la URSS, esa misma tarde Zhukov ordenaba al comandante de las tropas soviéticas en Hungría  prepararse para el combate.


 

(Continuara…)

martes, 28 de marzo de 2023

Heraclio, azote de Persia ( 38ª parte )

 


Viene de aquí:

  La falta de una defensa organizada de su capital no solo demostraba el pobre estado en el que se encontraba el ejército persa tras ser derrotado por bizantinos, turcos y musulmanes.Tambien mostraba lo poco preparadas que estaban las defensas  sasánidas contra un ataque desde el sur.

  Siglos de continuas guerras con bizantinos y tribus nómadas de la estepa euroasiática había hecho concentrar los esfuerzos defensivos sasánidas hacia el norte de Ctesifonte.

  El contraste entre la destruccion de  los puentes sobre el canal de Nahrawan para tratar de ralentizar la llegada de las tropas bizantinas en el año 627, con la extremada facilidad con la que los guerreros de Saad llegaron a Veh-Ardashir y tomaron Ctesifonte en el 637 mostro la debilidad de las defensas persas hacia la amenaza que había surgido desde el sur.

Canal de Nahrawan.
 

  Pero la evacuacion de  su capital practicamente sin lucha no significaba que no hubiera contingentes importantes de ejércitos sasánidas a los que los musulmanes debían derrotar antes de consolidar el control islámico de Mesopotamia.

  El principal ejercito persa, a mando de Mirhan y Kurrazad se había retirado al norte de Jalula (cerca de la actual Bagdad), en un lugar estratégico, entre las provincias persas de Mesopotamia, Korasan y Atropatene.

 

  También había contingentes persas al norte de Birtha (actual Tikrit ), en una poderosa fortaleza al norte del curso alto del rio Tigris, en el actual Mosul.

  El gobernador de la fortaleza, Intaq, había logrado reunir una poderosa guarnición  con supervivientes de Ctesifonte y nuevos reclutas de las tribus de árabes cristianos de la región.

  Tras tomar Ctesifonte, Saad envió la mayor parte de su ejercito hacia Jalula en abril, y alrededor de 5.000 hombres bajo el mando del general Abdulla para atacar la fortaleza en la que se encontraba Intaq.

  Abdulla intento un ataque frontal, siendo rechazado fácilmente por las  tropas de Intaq. Abdulla envió entonces varios espías  para contactar con el contingente de arabes cristianos.

  Parece que los persas se enteraron de  la traición de los árabes, y trataron de  abandonar la fortaleza, pero fueron descubiertos  por  los musulmanes y sus antiguos aliados árabes.

  La guarnición, reducida tras la traición de los arabes, apenas pudo resistir unos días, y los musulmanes recibían la rendición de Mosul sin apenas lucha.

  Con la conquista de Mosul, Abdulla había cortado una posible ruta de retirada y de llegada de refuerzos  para las tropas sasánidas en Jalula, que disponía de una excelente posicion defensiva, con el rio Diyala al oeste y las estribaciones de los montes Zagros al este.

  Mihran sabía que la llanura  frente a Jalula se iba estrechando según se acercaba a la ciudad, y “canalizaría” al ejército musulman.Convirtio la propia ciudad de Jajula en una fortaleza, protegiendo  la ciudad con una linea de trincheras que se extendía desde los montes Zagros hasta el rio Diyala, sembrando la llanura de miles de abrojos para obstaculizar a la caballería e infantería musulmana.

Abrojos.
 

  Los arqueros y la artillería se colocaron en las fortificaciones para acosar a las tropas musulmanas en su aproximación  a la ciudad. Mirhram decidio que solo tras infligir gran daño a la fuerza  atacante dejaría su posicion defensiva para contraatacar y lograr una victoria decisiva.

Despliegue inicial.
 

  Al inspeccionar la disposicion  de  las defensas persas, Hashim, al mando del ejercito musulman, vio clara cuál era la estratagema de Mihran presentando a  los musulmanes una sola opción ofensiva : un ataque frontal.

  Eso era algo que Hasim no podía permitirse, ya que el tamaño de ambos ejércitos enfrentados era  posiblemente muy similar, entre 12 y 14.000 hombres cada uno.

  La idea de Hashim fue entonces alejar a los persas de su línea defensiva mediante el empleo de una de las más arriesgadas maniobras en las tácticas  militares: la retirada fingida.

  El peligro de esta táctica  es que una retirada fingida puede convertirse en una retirada muy real si la moral y la disciplina de los que tiene que realizarla no son lo suficientemente fuertes, y si el contrincante esta bien coordinado y sabe lo que se hace, la retirada fingida puede convertirse en un desastre.

  Tras las numerosas victorias de las tropas de Hashim desde la península arabiga hasta Jalula, el general musulman tenía todas las razones para creer en la disciplina y la destreza de sus soldados para intentar tan peligrosa táctica.

  No hay evidencia clara de lo ocurrido, aunque parece que la presencia de su propia trinchera y los abrojos impidió a los persas lanzar una persecución coordinada contra los musulmanes en fuga, tanto que los persas tuvieron que perder tiempo  construyendo  un puente para superar su propia trinchera.

  Así, la batalla comenzaría con un ataque frontal musulman, repelido por la artilleria y los arqueros persas,.Los musulmanes se retirarían, lo que tomaría Mihran como una señal de que su táctica funcionaba y que las tropas musulmanas estaban a punto de huir desordenadamente.

  Mihran lanzo entonces su planeado contraataque, y mientras  los persas avanzaban por la llanura en persecución de los musulmanes, se iban alejando de sus defensas.

  Primero tuvo lugar el choque entre ambas infanterías, en plena llanura. Hashim había ocultado en su retaguardia  un fuerte contingente de caballería, y lo lanzo sobre el flanco derecho persa, para capturar el puente recién construido sobre la trinchera persa, poco defendido.

  Una vez tomado el puente por la caballería musulmana, el resto de la batalla fue una repetición  mas de tantas otras batallas. Con su ruta de escape hacia la ciudad  en manos musulmanas, los persas se vieron  rodeados por el frente por la infantería musulmana y, en la retaguardia por la caballería.

 

  Atrapado por sus propias defensas, las tropas musulmanas y la orografía, el ejercito persa de desintegro con rapidez. Aunque algunos miles de soldados persas lograron huir y refugiarse en Jalula, el ejercito persa de Mihran y Kurrazad, que murio en combate, había dejado de ser una amenaza para los musulmanes.

  Tampoco se conoce con exactitud la fecha de la batalla final por Jalula, ya que algunas fuentes afirman que la batalla decisiva llegó tras un asedio musulman de 7 meses de duración, mientras que otras fuentes afirman que la batalla fue antes que el asedio, en abril del año 637.

  Así, Jalula había caído en manos islámicas a finales del año 637, mientras el aun rey sasánida Yazdagerd III instalaba su corte en Hulwan, a 150 kilómetros de Ctesifonte.Pero no iba a durar mucho allí, ya que a finales del año 638, el ejercito de Saad se presentaba frente a las murallas de la ciudad.

  Pero el emperador persa ya no estaba allí. Al oír las noticias de la cercanía del ejercito musulmán, había escapado, una vez mas, hasta Qom, 150 kilómetros al sur de lo que hoy es Teherán.

Restos de la antigua ciudad de Qom.
 

  La pequeña guarnición que había quedado en Hulwan poco pudo hacer para resistir la marea islámica, y la ciudad cayo en apenas dos semanas. Saad envió entonces un mensajero al califa Omar, preguntando que debia hacer, si asentar sus conquistas recientes o perseguir al rey sasánida.

  Omar tenia buena parte de sus dominios sufriendo la plaga de Anwas, y ordeno a sus hombres en Mesopotamia volver, ya que quería asaltar la Anatolia aun en poder del imperio bizantino. Y lo que hoy es la frontera entre Iran e Irak se convirtió en al frontera entre las tierra del califa y las del emperador persa, al menos momentáneamente.


 

(Continuara…)

sábado, 25 de marzo de 2023

1808: Napoleón: 1ª guerra peninsular ( XV )

 


Viene de aquí:

  La legión de la policía lisboeta era el contingente más numeroso del que Portugal disponía tras la invasión francesa, contando con más de 1200 hombres. La legión era vital para mantener la paz en la capital portuguesa, y tras recibir la noticia de su deserción masiva, el responsable civil francés en Lisboa, conde de Novion, envió un mensaje urgente al gobernador de Santarém clamando por el envio de  tropas francesas.

 

  El gobernador  ordeno al sargento Gambus formar un destacamento de infantería portuguesa para emboscar a los desertores y evitar que se reunieran con el ejercito ingles.

  Apenas salió de Lisboa con sus tropas, el sargento Gambus declaró su odio eterno a los franceses y marcho hacia Coímbra para unirse  a la caballería de la legion. Alli fueron recibidos entusiásticamente por la poblacion local y el general Andrada, que anuncio su deseo de asegurar el retorno del regente, aunque para ello tuviera que liquidar a todos los franceses presentes en tierras portuguesas.

  Al día siguiente, el teniente Antonio Pereira llevo a Coímbra una columna de  caballeria de unos 70 jinetes con sus caballos. Habian estado sirviendo a las órdenes del barón de Viomenil en Salvaterra de Magos, pero cuando escucharon los rumores que indicaban que varias unidades portuguesas al servicio de los franceses estaban desertando, subieron a sus caballos y salieron al galope para evitar la vigilancia de varios oficiales portugueses, que se negaban a desertar.

  Wellesley ya disponía en la península de mas de 13.000 hombres, a los que esperaba unir los aproximadamente 5.000 portugueses que se habían puesto  a las órdenes del general Freire.

 

  Wellesley orden al almirante Cotton llevar la flota a la desembocadura del Tajo y prepara allí una demostracion de  fuerza, para hacer creer a los franceses que el desembarco seria allí, en Lisboa, e inducirlos a mover tropas que de otra manera podían obstaculizar el avance del ejercito inglés.

  Para seguir recibiendo refuerzos y aprovisionamiento de los navíos de la Royal Navy, la intencion de  Wellesley era la de mantenerse lo mas cercano posible a la costa durante su marcha hacia el sur.

  Cuando Junot escuchó las noticias del desembarco ingles,  se dio cuenta de repente que las tropas franceses que tenía a su mando en Portugal iban a ser insuficientes. Las noticias de la reciente victoria de Bessieres habían restaurado la moral de las tropas, pero la rendicion de  Dupont en Bailen había sido catastrófica para la moral de los soldados franceses en la peninsula iberica. Y la consiguiente retirada del rey José de Madrid hacia el rio Ebro había puesto tierra de por medio entre el ejercito de Junot  en Portugal y el grueso de las tropas francesas en la península.

Caricatura del Rey Jose I, en la que aparece vestido con un traje hecho a base de vasos de vino, portando una bandeja con vino, mientras un mono muestra el rey de copas, y un sirviente le ofrece una bota de vino.
 

  Con pocas esperanzas de recibir refuerzos, la mejor oportunidad de Junot era tratar de concentrar sus fuerzas para derrotar al ejército de Wellesley antes que pudiera asentarse en Portugal.

  Si no lo conseguia, daría alas a la insurgencia portuguesa, que respaldada por el ejercito británico sería extremadamente difícil de derrotar.

  Las tropas francesas se extendían por toda la geografía de Portugal, y tras el desembarco británico Junot envio despachos para que todas las unidades que pudieran se dirigieran rápidamente hacia Lisboa.

  El general Loison estaba ocupado en las cercanías de Badajoz cuando recibió las órdenes. Dejo una fuerte guarnición en Envas y con sus restantes 6.000 soldados marcho al socorro de la  capital portuguesa

  Junot envió varios mensaje al almirante Siniavin solicitándole la ayuda de la flota rusa, ya  que el enemigo de ambos, Inglaterra, había intervenido directamente en España, y los rusos ya no tenían excusas para permanecer neutrales.

Almirante Dimitri Siniavin.
 

 La flota rusa se encontraba en el estuario del Tajo, y el almirante Siniavin no tenía ninguna intención de arriesgar su flota enfrentándola a la potente escuadra inglesa, a menos que los navios ingleses intentaran forzar la entrada al rio Tajo.

  Junot esperaba que  los navíos rusos pudieran al menos distraer a la Royal Navy ocupando la entrada al rio Tajo, para asi poder reunir algunos soldados de las guarniciones francesas cercanas a Lisboa. Pero la negativa rusa significaba que los hombres que Junot necesitaba para oponerse al avance británico seguirían en Lisboa, defendiendo la capital.

  Junot encargo al general Delaborde tomar sus tropas y avanzar contra  el enemigo, observar sus movimientos y maniobrar de la manera necesaria para retrasar la marcha del ejercito de Wellesley, para así dar algo de tiempo al general Loison para reunir las reservas francesas antes de lanzarlas a la batalla.

General Henry Francois Delaborde.
 

   Mientras, las tropas britanicas y portuguesas se encontraban el día 11 de agosto en Leiria, y sus respectivos comandantes comenzaron a discutir el curso de acción a llevar.

  El general Freire quería marchar directamente sobre Lisboa, marchando por las montañas que rodeaban Santarém, abandonando así la costa. Pero Wellesley se negaba a perder la conexión  con su flota. Además , pensaba que transportar la artillería por el terreno montañoso sería muy dificultoso y se perderia demasiado tiempo.

 

  Los suministros conseguidos por la junta de Oporto se habían repartido en Leiria entre ambos contingentes, portugués y britanico. Pero los soldados de Freire se habían apropiado de buena parte de los suministros, lo que provoco fuertes discusiones entre oficiales de ambos ejércitos, culminando con la negativa del general Freire de combinar sus fuerzas con las de Wellesley.

  Finalmente, tras intensas negociaciones, Freire consintió en ceder a Wellesley 1600 hombres de infantería ligera y un par de centenares de soldados de caballería, a los que se puso bajo mando del coronel Nicholas Trant, un irlandés que servía en el ejercito portugués,caballeria bien equipada y entrenada que iba a  ser bienvenida en un ejercito ingles que tenía una importante escasez de esa arma.

 

  Wellesley  sospechaba que no iba a tardar mucho en encontrarse con el enemigo, y decidió dejar tiendas y aprovisionamiento innecesario en Leiria, además de algunos cañones por la falta de mulas para transportarlos. Al llegar a Alcobaca, fue informado que las tropas del general Thomieres habían abandonado la localidad  hacia solo un día, aunque los franceses permanecían en las cercanías

  Delaborde planeaba detener a los aliados antes de que llegaran a Batalha, pero  tras recibir informes  de la superioridad numérica del contingente anglo-portugués, decidió que el riesgo de quedar rodeado era grande, y retrocedió en busca de una mejor posición defensiva en Rolica.

  Iba a ser allí donde los soldados británicos  iban a disparar sus mosquetes por primera vez, cuando la vanguardia británica, formada por infantería ligera encontró a un grupo de  forrajeadores franceses armados solamente con picas y algunos pocos mosquetes

  Los franceses pudieron retroceder hasta un molino cercano, en donde resistieron los asaltos de cuatro compañías de infantería británica, hasta que se vieron obligados a retirarse hacia Rolica.

  Perseguidos por los infantes británicos, los forrajeadores lograron llegar a Rolica, ocupada por los tirailleurs, lo que dio comienzo a un furioso tiroteo que duro hasta que llego  la caballería francesa , obligando a  los britanicos a retroceder.

Tirailleurs.
 

  Tras la escaramuza, los franceses se retiraron momentaneamnte  de  Rolica, creyendo que el grueso del ejercito de Wellesley estaba cerca. Pero, cuando Wellesley supo que Delaborde se había detenido y mostraba signos de oponerse al avance aliado, se preocupo, ya que no quería ser flanqueado por los dos ejércitos franceses en la zona, el de Delaborde y el de Loison.Y decidió atacar al día siguiente, antes que que ambos ejércitos franceses pudieran unirse.

  Se retiro hasta Obidos, donde el ejercito paso la noche. Y a las 7 de la mañana del día 17 de agosto, el ejército anglo-portugués se puso en marcha hacia Rolica.

Sello conmemorativo de la batalla de Rolica.

 

(Continuara…)