"Batalla de Rolica", obra de William Heath. |
Viene de aquí:
Delaborde iba a elegir un terreno favorable para esperar el ataque britanico. La localidad de Rolica está situada sobre una llanura arenosa, a unos 5 kilómetros al suroeste de Obidos.
La llanura está limitada por tres lados por colinas de poca altitud. El lado abierto miraba hacia el norte, y Delaborde había colocado a sus hombres justo antes del pueblo, pero con la intencion de retirarse a una mejor posición defensiva en la localidad de Columbeira, donde podría aprovechar las colinas, salpicadas de olivares y vides, el terreno ideal para la infantería ligera.
Wellesley dividio sus tropas en
tres columnas, y tomo el mando de la columna central, de 9.000 infantes y una veintena
de cañones. Su intención era fijar al enemigo mientras las otras dos columnas envolvían ambos flancos franceses.
La columna de la derecha, liderada por el general Trant estaba compuesta de una brigada de infanteria británica y 1.200 infantes portugueses, además de 50 de caballeria.Debian superar las colinas para caer sobre el flanco izquierdo francés.
La tropa del general Ferguson comprendía dos brigadas de infantería, 40 de caballería anglo-portuguesa y seis cañones,y atacaría por la izquierda, superaría las colinas y caería sobre el flanco derecho francés.
El campo de batalla visto desde la posicion de Wellesley. |
Si todo iba según lo preveía Wellesley, los francesa se verían rodeados por una fuerza cuatro veces superior numéricamente, y no tendrían mas remedio eu rendirse.
Mientras la infantería britanica avanzaba, su artilleria abría fuego desde larga distancia. Los franceses estaban impresionados por la precisión y la disciplina que se observaba en la maniobra de la infanteria británica por la llanura. El orden de cada formacion se mantenía en todo momento, casi como si estuvieran desfilando.
La artilleria francesa comenzo a disparar sobre la infantería británica, y Delaborde ordenó a su vanguardia de infantería ligera acosar a la infantería ligera británica antes que llegaran a las primeras casas del pueblo.
Las columnas de flanqueo inglesas habían tenido dificultades y habían progresado muy lentamente en las colinas. Cuando finalmente lograron tomar contacto con el enemigo, Delaborde dio la orden de retroceder, usando arboles y pequeños muros para retirarse ordenadamente.
Mientras retrocedían, los infantes franceses seguían manteniendo un fuego muy preciso sobre los aliados que avanzaban y no tenían posibilidad de responder debido a la lentitud de sus columnas de flanqueo, que aun no habían llegado a sus posiciones.
La brigada de infantería del general Fane trataba de perseguir a los franceses hasta el pueblo de Columbeira, pero fueron obligados a detenerse gracias al fuego de los francotiradores franceses y su artillería, que cubría la retirada
Tras observar que su plan había fallado en envolver a su enemigo por los flancos, Wellesly adelantó la artillería y ordeno bombardear las colinas, enviando de nuevo a Ferguson y Trant, intentando de nuevo envolver a las tropas de Delaborde por ambos flancos.
Dada la superioridad numérica de los aliados, había poco que los franceses pudieran hacer para evitarlo. Solo la posibilidad de la aparicion de las tropas del general Loison podría equilibrar la balanza. Y Wellesley había reforzado a la columna de Ferguson para detener a Loison si se acercaba demasiado al campo de batalla de Rolica.
La columna de Trant se infiltro tras el flanco izquierdo francés, usando la proteccion de las colinas para caer sobre la retaguardia francesa. Wellesley había elegido a los portugueses para esa tarea, en parte para probar la capacidad combativa de las tropas portuguesas a su disposición, pero sobre todo por su conocimiento de la topografía del lugar.
Aunque Delaborde había podido retirarse de Rolica en buen orden con escasas perdidas, todo lo que Wellesley debía hacer era presionar el centro francés y esperar que sus columnas de flanqueo cayeran sobre los franceses desde ambos lados.
Wellesley envió su infantería ligera a las colinas, mientras la artilleria británica volvía a bombardear las posiciones francesas.
Pero Delaborde había utilizado perfectamente el terreno a su favor, colocando sus formaciones mas numerosas al otro lado de las colinas, donde el efecto de la artilleria enemiga era mucho menos dañino.
El 29 regimiento de infantería, al mando del coronel Lake, se lanzo al asalto de las posiciones francesas. Cerca de la cima de una colina, Lake desplegó a sus hombres, y los animo a prepararse para cargar en cuanto llegaran refuerzos del resto del batallón.
Granadero e infanteria ligera del 29º regimiento. |
Pero hubo unos instantes de confusión, ya que entre las tropas francesas se encontraba un contingente del 4º regimiento suizo, al servicio del emperador francés, que vestían también uniformes rojos, como los ingleses.
Los infantes ingleses no dispararon sobre los suizos, creyendo que eran también ingleses, tiempo que aprovecharon los franceses para flanquear a los infantes del 29 batallón.
El coronel Lake murió debido a un disparo en el cuello, y sin su coronel, sus hombres comenzaron a flaquear. Cuando un batallón de infantes franceses cargo a la bayoneta, la resistencia británica se derrumbo. De los 70 granaderos ingleses que habían llegado a lo alto de la colina, solo quedaron 20, 6 oficiales y 14 soldados, que fueron capturados y enviados a la retaguardia francesa.
Mientras el flanco derecho francés repelía los continuos intentos británicos, la columna británica y portuguesa del general Trant expulsaba a los franceses de las colinas y se aproximaba peligrosamente a la retaguardia francesa.
En esos momentos, el general Delaborde ya sabía que las tropas del general Loison no llegarían a tiempo al campo de batalla, y viendo que su flanco izquierdo iba a ser superado por la infantería de Trant, ordeno la retirada general, usando su regimiento de cazadores a caballo, su única caballería, para cubrir la retirada.
Dividió entonces a sus tropas en cuatro batallones, y , mientras dos se retiraban, los otros dos se detenían para repelar la persecución, cambiando de posición pocos minutos después, y así sucesivamente hasta que consiguió sacar a sus tropas de la llanura, mientras su caballería cargaba de vez en cuando contra la infantería ligera británica para persuadirlos a abandonar la persecución.
La escasez de caballería aliada restringió seriamente el intento de persecución para presionar a la retaguardia francesa, que pudo retirarse con cierta facilidad, y solo cuando llegaron a un estrecho desfiladero cerca de Zambugeira la retirada se desordeno, y los franceses tuvieron que abandonar tres de sus cañones y un par de docenas de prisioneros.
Las tropas del general Delaborde sufrieron 600 bajas, y los aliados 450 entre muertos, heridos y prisioneros, todos ingleses, ya que las tropas portuguesas, que habían formado parte de la columna de Trant, no habían tomado contacto con el enemigo en ningún momento.
Tumba del coronel Lake, en Rolica. |
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