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martes, 3 de diciembre de 2024

"Adiós, Europa": Indochina (XI)

 


Viene de aquí:

  Durante 1949, como preludio a su ofensiva, las tropas de Giap habían llevado a cabo un buen numero de ataques contra las posiciones defensivas francesas en la region de Lao Cai, para entrenar a sus soldados en los métodos de atacar las posiciones fortificadas francesas.

  Tras estudiar los resultados de esos ataques, se ordenaron más entrenamientos, ya que los soldados vietminh habían sufrido gran numero de  bajas.

  Durante febrero de 1950, Giap había enviado a la división 308, la mejor entrenada, a Lao Cai, para atacar las más poderosas posiciones defensivas francesas. Pero los franceses lograron organizar un efectivo puente aéreo para aprovisionar sus posiciones defensivas.

 

 Finalmente, los paracaidistas franceses, lanzados sin oposición vietminh para reforzar las posiciones defensivas, consiguieron hacer retroceder a Giap y sus tropas, ya que Giap se negó a pagar el altísimo coste en vidas y material que supondría seguir atacando a los franceses. Pero, aunque había sido una clara derrota, Giap estaba contento con la actuación de  sus tropas, que habían mejorado mucho en su preparación y experiencia.

  Para los franceses, la victoria sobre las tropas de Giap tuvo un efecto “adormecedor”, que les hizo confiarse y les dio un falso sentido de seguridad, viendo la retirada de Giap como una clara evidencia de la incapacidad de los soldados vietminh para tomar una posicion defensiva bien aprovisionada y fortificada.

  Giap envió a la división 308 a descansar y reaprovisionarse. A finales de mayo, la 308 ya estaba de nuevo en movimiento y preparada, y Giap la enviaba a atacar Dong Khe, una fortificacion entre Cao Bang y That Khe que controlaba la carretera colonial nº 4, una ruta que los franceses utilizaban para aprovisionar la base militar de Cao Bang.

Ruta colonial 4.
 

  El 25 de mayo, la artillería divisionaria vietminh comienza a bombardear Dong Khe , y tras dos diasas de bombardeo, comienzan los asaltos frontales a base de oleadas humanas de infanteria viet .A pesar de la fiera resistencia francesa, la fortificación fue tomada por las tropas vietminh, y apenas un puñado de defensores pudo escapar, de los 100 que formaban la guarnición.

Dong Khe.
 

  Un par de días después, aprovechando la noche, un batallón  de paracaidistas franceses  sorprendía dormidos a los vietminh que guarnecian Dong Khe.En el combate cuerpo a cuerpo que  siguió, los paras consiguieron hacer huir a los vietminh. Pero fue una victoria  amarga, los franceses sabían que los soldados viet podrían volver a retomar Dong Khe prácticamente cuando quisieran, a menos que los franceses reforzaran la posicion masivamente, algo que no iba a ocurrir.

 A pesar de la retirada  a manos de los paracaidistas, los soldados de Giap ganaron confianza, mientras la moral francesa caía considerablemente.

  Dong Khe fue vuelta a ocupar por una guarnicion de infantería francesa, pero todos sabían lo que iba a pasar, y miraban  a la jungla que los rodeaba, esperando el siguiente moviemiento de  las tropas de Giap.

  Giap atacó e nuevo Dong Khe el 16 de septiembre, ocupándolo de nuevo tras un feroz combate cuerpo a  cuerpo. Para dificultar un posible contraataque frances, los soldados vietminh se atrincheraron, construyendo nuevas defensas y reforzando las ya existentes.

El ataque vietminh del 16 de septiembre sobre Dong Khe.
 

  Pero el contraataque francés nunca llegó, ya que el alto mando frances se había dado cuenta de la inutilidad de defender unas posiciones que serían tomadas por las tropas de Giap simplemente por su superioridad numerica. Además, la caída de Dang Khe  en manos vietminh dejaba la base militar de Cao Bang aislada, y solo podría ser aprovisionada desde el aire. Y Francia decidió entonces abandonar Cao Bang.

  En vez de volver a atacar Dang Khe, los franceses enviaron una columna de refuerzo desde Lang Son para reforzar a los franceses, que se retiraban por la ruta colonial 4 tras abandonar Cao Bang.

  Desde el principio, la operación parecia estar destinada al fracaso. Ninguna de las columnas sabía realmente cuales eran sus ordenes concretas, y no había un comandante sobre el terreno para coordinar ambas columnas.

Algunos tramos de la Ruta colonial 4 eran ideales para emboscadas.
 

  El contingente que procedía de Cao Bang, en vez de destruir su equipamiento  pesado para moverse más rápidamente, se desplazaba con su artillería, camiones y automóviles blindados, que ocupaban todo el ancho de la carretera y , cuando alguno se averiaba, provocaba el colapso de buena parte de la columna., facilitando las emboscadas vietminh.

  Finalmente, la columna abandono su material pesado y también abandono la carretera, para moverse por al jungla y tratar de mantenerse fuera del alcance de los escurridizos soldados vietminh. Pero los franceses no estaban acostumbrados a moverse en la jungla, y se perdieron.

Emboscada viet sobre convoy de aprovisionamiento frances.
 

  La columna que había salido desde el sur, desde Lang Son, recibió ordenes para capturar de nuevo Dong Khe, donde deberían esperar a la columna del norte. Pero la orden cambio muy pronto, y se les ordeno internarse en la jungla para reunirse con la otra columna, aunque no sabían dónde estaba.

  Al final, bajo constantes ataques, ambas columnas lograron encontrarse. Pero aun unidas, las tropas francesas debían luchar en una proporción de 1 a 10 contra las tropas vietminh, unos 4.000 franceses contra 4 divisiones  vietmih, unos 40.000 hombres.

"Batalla de la Ruta Colonial 4 "
 

  La situación empeoró mas aun cuando el alto mando francés decidió retirarse de Lang Son, llevándose consigo a las unidades de apoyo que allí se encontraban, pero dejando intactos los enormes almacenes y depósitos de armas y municiones localizados allí. Como resultado, cientos de  vehículos y una enorme cantidad de munición, armas, combustible y suministros médicos quedaron allí .

  Mientras las columnas francesas se movían a duras penas por la jungla, el abandono de  Cao Bang en manos vietminh había dejado en manos de las tropas de Giap más de 40 kilómetros  de carretera hasta Dong Khe. Desde sus bases en la frontera con China, los vietminh podían aprovisionarse con facilidad, usando más de 300 camiones Molotova donados por los rusos, porteadores, mulas de carga y bicicletas.

Soldaddos sudvietnamitas revisando un camion ruso Molotova destruido.
 

  A duras penas, los marroquíes del 11º Tabor y los paracaidista del 1er BEP conseguían mantener la retaguardia francesa casi intacta y en movimiento, mientras soportaban los ataques de no menos de  5 batallones vietminh.

  Pronto, los heridos que no podían caminar eran abandonados allí donde   caian. Muchos eran rematados allí mismo por los soldados vietminh, que tenían la orden de no hacer prisioneros excepto si eran oficiales.

  Mientras algunos grupos de  soldados franceses trataban de  reorganizarse para presentar batalla, otros trataban de escapar. Rodeados de más de un batallon de  soldados vietminh, una docena de miembros de  la Legión Extranjera, alemanes veteranos de la 2ª guerra mundial, calaron sus bayonetas y se lanzaron contra el enemigo.No se volvio a saber de ellos. Otro grupo de  paracaidistas del 1 BEP consiguió romper la línea vietminh y escapar, a base de granadas y pistolas, haciendo posible que un grupo de  un  centenar de soldados marroquíes pudiera escapar por la brecha.

Paracaidistas del 1º BEP.
 

  Otro grupo de marroquies, agotadas las municiones y rodeados, tomaron sus cuchillos, y cantando sus canciones de batalla, se lanzaron contra el enemigo, muriendo todos.

  Lo que apenas 48 horas antes eran unidades muy efectivas en combate habían sido practicamente aniquiladas, y solo grupos aislados pudieron llegar a las líneas francesas.

  Aun mas preocupante para la presencia francesa en Indochina fueron las perdidas en material. Tras ocupar la abandonada Lang Son sin lucha, el ejercito viet se apodero de mas de 10.000 toneladas de munición, 10.000 proyectiles de 75 mm, 4.000 subfusiles, y una enorme cantidad de gasolina , suficiente para avituallar durante meses  a buena parte del ejercito vietminh en la zona.

  La derrota fue tan grave que en la indochina francesa comenzó a hablarse de evacuación. Muchos civiles franceses comenzaron a hacer las maletas. En la metrópoli, el apoyo de la población francesa a la intervención militar en Indochina descendio del 40% que había en 1947, hasta el 27%.

  Pero el fin no había llegado aun para la presencia francesa en Indochina. Apenas dos meses después de la catástrofe francesa en la carretera colonial 4, el general Jean de Lattre de Tassigny aterrizaba en Saigon.


 

(Continuara…)

lunes, 11 de noviembre de 2024

"Adiós, Europa": Indochina (X)

 


Viene de aquí:

  Durante el año 1950, las unidades de guerrilleros del viet Minh se transformaron hasta llegar a convertirse en un ejército regular. Los  soldados  destinados a la infantería eran adiestrados en los campamentos de instrucción que habían establecido los chinos cerca de la frontera entre ambos países, en Nanning, mientras los artilleros salian del campo de  instrucción de la artilleria china en Ching Hsi.

Unidad de morteros del Ejercito Popular de Vietnam.
 

 Pronto aparecieron en Vietnam los primeros batallones del ejército popular en formación cerrada, armados de lanzagranadas pesados y cañones ligeros sin retroceso de procedencia norteamericana, material que poco antes había sido suministrado por los EE.UU. a los soldados del Kuomintang de Chiang Kai Chek, que habían caido en manos de  los comunistas de Mao Tse Tung tras su victoria, que los había cedido a  los norvietnamitas para usarlos en su lucha contra los franceses.

  No tardaron mucho en aparecer también unidades de artilleria completas dotadas de piezas de origen americano de 105 mm y numerosas baterías de cohetes anticarro.

Soldados del Ejercito Popular del Vietnam a principios de 1950.Se puede distinguir a la izquierda una MP 40 de fabricacion alemana, y una ametralladora BAR de fabricacion estadounidense, a la derecha

  Giap pensaba en mantener libres para siempre las comunicaciones terrestres con China, y también en atacar la cadena de fortificaciones francesas en el norte que aun quedaban en activo, puesto que el ejército popular no era solo un nombre, sino que se habían convertido en un auténtico ejército en el sentido clásico de la expresión.

  El 1 de octubre, el bien equipado ejército popular vietnamita, con 14 batallones de infantería y tres baterías de artillería, comenzó a atacar las posiciones francesas. Diez mil soldados franceses defendían ese rincón del imperio colonial francés : franceses, vietnamitas anticomunistas y la legión extranjera, en la que figuraban numerosos alemanes, veteranos de la 2ª guerra mundial.

 Desde finales de 1947, el alto mando frances en Indochina había considerado esencial mantener una presencia militar continua en las zonas rurales con mayor presencia de unidades vietminh para la realizacion de  ataques y difusión de propaganda.

  Las discusiones sobre como lograr una presencia más completa comenzaron con la llegada del general Pierre Boyer de Latour du Moulin, nuevo comandante de las tropas francesas de indochina sur ( TFIS) en julio de  1947.

General Pierre Boyer de Latour du Moulin.
 

 Boyer de Latour, un veterano muy condecorado en ambas guerras mundiales y ex comandante de un batallon de  tiradores argelinos se había convertido en jefe de operaciones militares y civiles en la Conchinchina.

  El conocimiento y la experiencia de Boyer de Latour en los combates contra los alemanes en el desierto del norte de África llevaron a la creación de un amplio sistema de búnkeres militares fortificados en las provincias del norte capaces de resistir asaltos armados, para así disuadir al enemigo de llevar a cabo más ataques.

  Las tropas francesas iban a utilizar los bunkers como base para la realización de patrullas a pie, teniendo en cuenta que las fortificaciones siempre se construían cerca de poblaciones o al lado de carreteras y caminos de acceso a las zonas rurales, donde los propagandistas vietminh acostumbraban a reclutar a nuevos miembros para sus guerrillas.

 

 En comparación con las versiones posteriores, las torres de vigilancia construidas en 1948 eran bastante rudimentarias y consistían, por lo general, en cuatro paredes de ladrillo rematadas por tejas de pizarra. Las paredes tenían entre 25 y 40 cm de espesor y se complementaban con un muro bajo que rodeaba el edificio. La entrada a la fortificación estaba ubicada al menos a dos metros sobre el nivel del suelo y el puesto de observación se encontraba a una altura de cinco a seis metros con un alero para permitir el lanzamiento de granadas. En las primeras versiones, una escalera en el exterior del edificio daba acceso a la entrada, pero las versiones posteriores fueron equipadas con escaleras internas que brindaban mayor protección.

 

 El grosor de las paredes de las versiones construidas a partir de 1949 también se incrementó y las fortificaciones a menudo contenían paredes interiores y exteriores hechas de hormigón armado, troncos de árboles o vallas de bambú. Esta era una consideración importante ya que los guerrilleros solían colocar explosivos en la base del fuerte en un intento de debilitar su estructura. Los explosivos podían colocarse a mano o sujetándolos a largos postes hechos de bambú.

 Los fuertes, separados por un kilómetro entre sí, generalmente estaban atendidos por entre cuatro a seis hombres, pero los puestos de observación más grandes, llamados “tours-mères” ( torres madre ) contenían mayores cantidades de hombres y estaban armados en consecuencia. En cuanto a este armamento, los hombres estaban equipados con una variedad de pistolas, rifles, ametralladoras y otras municiones, incluidas las ametralladoras Hotchkiss M1922 o el rifle de cerrojo MAS-36, un arma ampliamente utilizada por las fuerzas francesas en Indochina. 

 

  La vida de los soldados destinados en una torre de vigilancia era repetitiva y monótona. Al amanecer, se enviaba una patrulla a buscar las trampas explosivas que los guerrilleros locales habían colocado durante la noche en los alrededores. Los días se pasaban reforzando las defensas de la torre de vigilancia, limpiando las armas y manteniéndose en forma con deportes como el voleibol. Para entretenerse, se organizaban juegos de cartas y, ocasionalmente, los soldados iban a un pueblo cercano a beber un vino de arroz casero tradicional, conocido como ‘ruou de’.


  

  A veces, los soldados cuidaban huertos de verduras instalados en el exterior. Escribir cartas también era una actividad importante. La correspondencia escrita con esposas, novias o familias permitía a los soldados en Indochina mantenerse al tanto de los acontecimientos en casa o tranquilizar a sus seres queridos. Como esta actividad contribuía en gran medida a mantener la moral, seis aviones garantizaban el envío y la entrega del correo tres veces por semana. Sin embargo, podía tardar hasta tres semanas en llegar a su destino, ya que los soldados eran trasladados a diferentes unidades o lugares.

  Por la noche, los habitantes de una torre de vigilancia escuchaban el más mínimo ruido que pudiera alertar a los de guardia nocturna de la presencia de un enemigo que intentaba lanzar un ataque sorpresa. Se colocaban latas de hojalata sobre alambre de púas en el perímetro interior del recinto para ayudar a detectar el movimiento del enemigo, aunque a menudo cualquier alarma se activaba por ratas, pájaros o incluso el viento. Si se producía un ataque, normalmente ocurría durante el período de seis horas entre la puesta y la salida del sol, según las diferentes estaciones y la posición de la luna.

 

  Los ataques solian ser repentinos. Varios cientos de asaltantes podían arrojarse contra las alambradas de púas o las vallas de bambú para crear una brecha, y luego oleadas sucesivas de Viet Minh intentarían invadir la torre de vigilancia o el recinto. Los ataques podían durar varias horas y si la defensa de una posición había tenido éxito, se podía pedir apoyo aéreo para despejar el área mediante bombardeos o ametrallando las posiciones del Viet Minh.

 La mañana siguiente se dedicaba a comprobar que no se habían colocado trampas explosivas o minas alrededor del campamento. Si había hombres muertos o heridos, había que evacuarlos; si se había agotado la munición de una torre de vigilancia, había que reemplazarla.

 Un ataque podía servir de pretexto para preparar una emboscada a quienes llevaban a cabo este trabajo, por lo que era necesaria una vigilancia extrema en zonas de intensa actividad del Viet Minh. 

 

 Era importante conocer con anticipación la posibilidad de un ataque, por lo que los franceses desarrollaron e implementaron sistemas de alerta temprana que les daban tiempo a las torres de vigilancia y a los recintos para prepararse. En este caso, para mantener la comunicación entre fortificaciones atacadas, un grupo de dos o tres hombres bien armados y equipados con walkie-talkies se posicionaban entre ambas a unos 500 metros de distancia.

 El proyecto de construcción de fortines continuó hasta bien entrados los años 50 bajo los auspicios del general Jean de Lattre de Tassigny. De hecho, la llamada Línea De Lattre era una serie de fortificaciones e instalaciones de armamento construidas alrededor del delta del río Rojo. La línea estaba formada por unos 1.200 fortines capaces de resistir el fuego de artillería del Viet Minh que se extendía a lo largo de una distancia de mas de 350 kilometros. Estaban conectados por carreteras capaces de soportar el peso de los tanques más grandes de Francia. Un inconveniente era que este tipo de fortificación era inmóvil y el Viet Minh podía atravesar los huecos entre los recintos con bastante facilidad.


 

 (Continuara…)