Alvaro de Bazan,marques de Santa Cruz.
El 27 de junio de 1570, durante
el reinado del sultán Selim II, una flota otomana se presentaba ante las costas
de Chipre, propiedad de la republica de Venecia.
Como los mismos venecianos decían,
conocedores de la peligrosa situación geografica de la isla, Chipre, “una estocada en la
boca del lobo”, era la posición de avanzada de la cristiandad en un mar musulmán,
a cientos de kilómetros de Venecia, era al mismo tiempo una provocación y una
tentación para cualquier sultán otomano.
Desde 1489,cuando Venecia adquirió
la isla, Chipre había pagado tributo a la Sublime Puerta otomana para mantener su
neutralidad.Copiosos sobornos llegaban a manos de los visires otomanos año tras
año, una política de apaciguamiento que era más barata que construir flotas de galeras,
pero lo único que hacía era convencer a los sultanes que la republica veneciana
nunca lucharía por la isla.
Y cuando en 1569 una flota de
corsarios cristianos capturó gran parte del tributo en oro y plata que se
enviaba desde Egipto a Constantinopla, el sultán Selim decidió que había llegado
el momento de apoderarse de la isla.
El 22 de julio, las tropas
otomanas comenzaban el asedio de Nicosia, la capital y más grande ciudad de la
isla,.Niccolo Dandolo, gobernador veneciano de la ciudad,encabezó la
resistencia.Pero la ciudad apenas había sido abastecida para resistir un largo
asedio, y el 9 de septiembre la ciudad se rindió.
Tras convencer a la guarnición de
Cirenes (actual Kyrenia) para rendirse, Lala Mustafá Pacha, el comandante otomano,
se aseguró un puerto para recibir suministros y refuerzos para continuar con la conquista de la isla.
Cirenes (Kyrenia ).
El 22 de agosto, las tropas
otomanas ponían sitio a Famagusta,tambien defendida por venecianos y algunos caballeros hospitalarios procedentes de Malta.Tras un mes de asedio, Lala Mustafá conminó a la rendición a Marcantonio Brigadin,
gobernador de Chipre, que habia logrado escapar de Nicosia.
Brigadin se negó a la rendicion, y Lala Mustafá le envió entonces la cabeza de Niccolo Dandolo clavada en una pica. Pero Brigadin siguió negándose a la rendición, ya
que sabía que parte del ejercito otomano
que asediaba Famagusta seria desmovilizado y enviado de vuelta a Turquía
en cuanto llegara el invierno, como era costumbre .
Niccolo Dandolo.
Los defensores lucharon
bravamente durante todo el invierno,esperando la llegada de la primavera,cuando
creían que recibirian refuerzos desde Venecia.
Pero,aparte de alguna incursion de pequeñas flotillas o galeras aisladas,no hubo refuerzos de importancia para la defensa de Famagusta.
En abril los otomanos asaltaron
las murallas de Famagusta. Las murallas de la ciudad, ciudad costera, solo
tenían una puerta de acceso, la puerta de Limisso, protegida por un ravelin (fortificacion medieval en forma triangular).
Desde el ravelin, un puente
cruzaba el foso hasta otro ravelin situado al otro lado del foso.
El ataque a la puerta de Limasso
fue liderado por el propio Mustafá Pacha.Tras un combate que duro dos días, el
ravelin exterior cayó en manos otomanas, pero los venecianos explotaron una mina situada bajo el ravelin, destruyéndolo por
completo.
El 9 de julio, a costa de grandes
pérdidas, los otomanos tomaban el ravelin interior, pero los venecianos tambien lo volaron, causando cientos de muertos entre la tropa otomana.
Los otomanos continuaron atacando,
y en uno de estos ataques murió el hijo mayor de Mustafa Pacha.El general otomano,
que ignoraba el hecho de que los venecianos ya no tenían pólvora para sus cañones
,y muy afectado por la muerte de su hijo, ofreció de nuevo la rendicion,esta vez
con unos términos muy ventajosos para los venecianos : los soldados venecianos
podían salir con sus armas y estandartes,serian trasladados en naves otomanas con seguridad hasta Candía, y la población
civil sería libre de marchar con los soldados o permanecer en Famagusta.
El 1 de agosto, Marcantonio Brigadin, sin noticias de la llegada de algún refuerzo, aceptaba los términos de
la rendición, y los soldados y sus familias comenzaban a embarcar en buques
otomanos.
El 5 de agosto, Brigadin y sus
oficiales estaban preparados para entregar formalmente la ciudad a los otomanos.
Al principio de la reunión, la actitud de Mustafá Pacha fue cortes y educada,
pero tras un comentario ofensivo por parte de uno de los oficiales venecianos encolerizo a Lala Mustafa y ordeno asesinar a los oficiales de Brigadin,que fueron decapitados junto a la tienda en la que iban a firmar el acuerdo de rendicion.
A Brigadin se le amputaron la
nariz y las orejas, y fue arrojado a las mazmorras. Dos semanas después fue
llevado hasta el puerto, a la vista de
las galeras en donde se encontraban los soldados y civiles venecianos.
“Mira si desde aquí puedes ver tu
flota, cristiano, mira si llega la ayuda a Famagusta”.
Marcantonio Brigadin fue
torturado,desollado vivo, decapitado y descuartizado. Su piel fue rellenada de paja y enviada a Constantinopla
para deleite de las elites otomanas.
Martirio y muerte de Marcantonio Brigadin.
A continuación, los soldados y
civiles venecianos fueron asesinados. A unos cientos se les ato las manos y
fueron arrojados al agua. Otros fueron degollados, o empalados, o quemados
vivos.
Desde entocnes, Mustafa Pacha
tomo el sobrenombre de Kara (negro, oscuro, en referencia a su crueldad).
Pocos años después, los venecianos
lograron escamotear de Constantinopla la piel de Brigadin y trasladarla a
Venecia, en donde aún se encuentra, en la Basilica de san Giovanni y Paolo.
Los restos de Marcantonio Brigadin,en la Basilica de San Giovanni y Paolo.
Los venecianos juraron venganza,
y otras potencias marítimas del Mediterráneo cristiano se unieron al empeño
veneciano.
A instancias del papa Pio V,
España, Genova, Venecia, el papado y los caballeros de San Juan formaron la poderosa Liga Santa.
El día 25 de mayo de 1571, tras
diez meses de discusiones y disputas, se firmaba el documento de
creacion de la Liga Santa en la sala del Consistorio del Vaticano. Los términos del acuerdo se limitaban a dar algo a
cada uno de los firmantes.Por ejemplo, al rey Felipe II de España no le
interesaba si Chipre volvía a control veneciano o no, solo quería el apoyo de
la Liga para, tras derrotar a los otomanos,volverse sobre las posesiones
otomanas en Africa del Norte.
Los venecianos querían recuperar
Chipre, y no les interesaba lo que pudiera pasar en el norte de africa.Y ambas partes, España y Venecia,estaban convencidos que el deseo del pPapa era que la liga Santa, tras
derrotar a los turcos, reconquistara Tierra Santa para la cristiandad.
Los arreglos financieros (quien
iba a costear los gastos de las operaciones) fueron los que más discusiones
suscitaron entre los participantes de la Liga Santa. Al final convinieron en
que España pagaría la mitad, Venecia un tercio, y el papado se haria cargo del
sexto restante.
Había que apresurarse, ya que a
las cortes europeas llegaban preocupantes noticias.Ademas de la flota del
almirante Ali Pacha,que había zarpado para Chipre en marzo, otra flota otomana, la
del visir Pertev Pacha zarpaba de Constantinopla
sin destino conocido a primeros de mayo.
Mientras, el ejercito terrestre
otomano salía de Constantinopla a finales de abril en dirección a la costa del mar Adriatico,desde donde podría amenazar las posesiones venecianas.Y los piratas
otomanos de Tunez, liderados por Uluch Ali ultimaban los preparativos para
atacar las posesiones cristianas en la costa mediterránea de España y la costa italiana.
La única oportunidad que los cristianos
tenían para enfrentarse en igualdad de condiciones con el imperio otomano era en
el mar, y el arsenal de Venecia, un complejo de astilleros y armerías, se puso
a la tarea de fabricar una gran cantidad
de galeras y galeazas para la expedición.
Arsenal de Venecia.
El 7 de octubre de 1571, las
flotas se enfrentaron en la batalla de Lepanto, en el golfo griego de Patras.
El flanco izquierdo de la Liga Santa
estaba liderado por el almirante veneciano Agostino Barbarigo, el centro era
para el comandante de la flota, don Juan de Austria, y el ala derecha al mando
del almirante genovés Gian Andrea Doria.
El comandante de la retaguardia de
la flota de la Liga Santa era Álvaro de Bazan, marques de Santa Cruz, uno de
los más grandes comandante navales de la historia de España. Sobre su galera
"Lupa" (loba) ,Bazan cumplio sus ordenes a la perfeccion, y en un momento clave de la batalla, envio a parte de la retaguardia a
taponar eun brecha en la línea de galeras cristianas.
Uno de los soldados que combatió
en Lepanto fue Miguel de Cervantes, que en su famosísima obra Don quijote
incluyó unos elogiosos términos dirigidos al Marqués de Santa Cruz:
"En este viaje se tomó la galera que
se llamaba la presa, de quien era capitán un hijo de aquel famoso corsario Barbarroja.Tomola la capitana de Napoles,llamada la loba, regida por aquel rayo
de la guerra, por el padre de los soldados, por aquel venturoso y jamás vencido
capitán don Álvaro de Bazan,marques de Santa Cruz."
Don Quijote, primera parte,
capitulo XXXIX.
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