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| Ruinas del teatro griego de Delos. |
Viene de aqui :
Como los otros estados griegos, Rodas también envió una delegación a Roma para felicitar oficialmente al senado romano por la victoria en Pidna, pero el senado se negó a recibirles e incluso negaron hospitalidad, con el pretexto que Rodas seguía siendo enemiga de Roma.
Los enviados rodios trataron de forzar la situación y se prostraron frente al edificio senatorial, pero fue inútil, y Rodas fue castigada con la perdida de todos los territorios que habían conseguido tras el final de la 2ª guerra macedonia.
Además, Roma convirtió la isla de Delos en un puerto libre de impuestos, y lo puso bajo control ateniense, dañando así financieramente a los etolios, que perdieron gran cantidad de ingreso por impuestos de comercio.
Rapidamente Delos se convirtió en el centro del comercio de esclavos del Mediterráneo oriental, y Rodas perdió mas del 30% de sus antiguos ingresos.
Aun así, Rodas pudo mantener su principal fuente de ingresos, el comercio de grano en el Mediterráneo oriental, ya que Delos no tenía un puerto lo suficientemente grande para los grandes transportes de grano. Pero de todas maneras, muchos comerciantes comenzaron a pasar de largo por Rodas y marchaban hacia Delos, en donde el régimen fiscal era más favorable.
Atenas consiguió hacerse con la isla de Lemnos y el enclave de Haliartus, en Beocia. Atenas fue premiada no solo por su ayuda a las tropas romanas, tanto como en tropas como en suministro de grano, sino porque para Roma era mejor tener estados griegos lo suficientemente fuertes,pero no tanto para convertirse en una amenaza al balance de poder, crear un buen numero de estados débiles y no unos pocos estados realmente fuertes, como había ocurrido al final de la 2ª guerra macedonia.
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| "Ruinas de Haliartus, en Beocia", obra de Dodwell Edward. |
Las humillación de Rodas y Pergamon habían sido diseñada por el senado romano para convertirse en un ejemplo para los demás, para mostrar que el poder de Roma era imbatible, que podía terminar con el poder de reinos fuertes sin tener ni siquiera necesidad de ir a la guerra contra ellos. Los rodios siguieron intentando legalizar un tratado formal de alianza con Roma, pero el senado siempre lo rechazaba, no consideraba a los rodios como iguales y merecedores de un tratado de alianza con Roma.
Finalmente, en el año 164 a.c. los romanos acordaron firmar un tratado de alianza con Rodas, pero para seguir demostrando su primacía, se reservaron el derecho a intervenir en los asuntos internos de Rodas si lo necesitaban.
En el 196 a.c., un exultante Tito Quincio Flaminino había declarado ante una casi histérica audiencia griega que los pueblo griegos habían sido liberados del yugo macedonio, y que tampoco Roma influiría en los asuntos griegos, que eran libres para gobernarse a sí mismos y decidir las políticas a seguir, su propio futuro.
Solo 30 años después, el también cónsul Lucio Emilio Paulo cometeria en el Epiro una de las más salvajes atrocidades de la historia de la republica romana.
En esos 30 años, Roma había pasado de la aparente benevolencia con los derrotados pueblos griegos a una especie de limpieza étnica, ademas de imponer indirectamente cambios de régimen en numerosas ciudades y estados de Grecia, Iliria y Macedonia. El guante de terciopelo que Roma había pretendido llevar para sus relaciones con los pueblos griegos no había servido para nada más que revelar sus intenciones imperialistas.
Tras sus victorias tanto en el Mediterráneo oriental como en el occidental, Roma había comzado a verse a sí misma como una potencia invencible, que quería seguir siéndolo, ganando batallas y extendiendo su dominio.
Así, la palabra latina imperium, que al principio solo significaba el poder que un funcionario romano obtenía para cumplir sus funciones como funcionario publico, paso a evolucionar y tomo una connotación geográfica, como los “lugares bajo control de Roma”.
Y la relativa facilidad y velocidad con la que Roma se estaba convirtiendo en un imperio comenzó a atribuirse a una ayuda divina. Asi, la gran mayoría de los romanos estaban seguros que habían sido destinados a tener un Mediterráneo romano, gracias a la influencia divina.
Tras la casi desmenbracion de Etolia, cada aspirante a sicofante (chivato profesional) griego se dirigió a Amfipolis para regalar los oídos del cónsul Emilio con informes de aquellos griegos que habían sido en algún momento aliados de Perseo.
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| Leon de Amfipolis, datado en el siglo IV a.c. |
El cónsul Emilio premiaba con largueza a los chivatos, y comenzó a llenar listas de griegos basadas en tales informes, y ordeno que todos los nombres que aparecían en las listas (hombres de Etolia, Acarnania, Epiro, Tesalia, Beocia, etc) fuera detenido y enviado al exilio a Italia.
El cónsul Emilio esperaba eliminar así todo tipo de oposición a la presencia y la influencia romana en Grecia.La gran mayoría de los miles de detenidos enviados a Italia nunca regresaron a Grecia. La liga Aquea, que había intentado congraciarse con Roma y recobrar su amistad, no lo consiguió, y más de 1.000 aqueos fueron deportados a Italia, incluyendo al historiador Polibio, destinado para liderar la liga Aquea en algún momento, que tras permanecer 15 años exilado en Roma decidió trabajar como asesor del senado romano antes de ser nombrado embajador en las ciudades griegas.
Además de enviar a presuntos rebeldes griegos al exilio, el cónsul Emilio pasaba su tiempo en Anfipolis recibiendo regalos y presentes de las ciudades griegas, tanto que algunos pensaban que quería proclamare rey de Grecia.
Tras su rápida victoria sobre el rey ilirio Gencio, el cónsul Lucio Anicio Galo había ocupado el norte del Epiro, la base desde la que operaban los molosos y otras tribus rebeldes del Epiro.
La ciudad de Passaron (actual Ioannina), se convirtió entonces en la base de las tropas romanas en el Epiro, y, desde allí, ambos cónsules (se había extendido su mandato consular un año mas, para que ayudaran a los enviados del senado romano a supervisar los nuevos asentamientos de ciudadanos romanos en la zona), Emilio Paulo y Anicio Galo se dispusieron a castigar a los ilirios.
En el invierno del 168-167 a.c., todos los nobles de las tribus ilirias fueron convocados a una reunión en Scodra, en donde se le comunicaría su futuro.
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| Ruinas de la fortaleza illiria de Scodra. |
Anicio declaro Iliria libre, y anuncio que las guarniciones romanas en Iliria serían desalojadas en cuanto se tuviera una oportunidad. Aquellas tribus que se hubieran rendido a Roma sin luchar quedarían eximidas de pagar tributo. Las tribus que se habian resistido a Roma seguirían pagando tributo, solo que la mitad iria para Roma y la otra mitad para el mantenimiento economico de la tribu. Cualquirir epirota acusado de conspirar contra Roma sería ejecutado o exiliado.
Como en Macedonia, la monarquía illiria fue abolida, y el norte de la región fue dividido en tres republicas, que operarían con las mismas restricciones que los nuevos estados macedonios (restricciones en el comercio y prohibición de matrimonios entre ciudadanos de las distintas nuevas republicas).
La poderosa flota del rey Gencio fue dividida entre los puertos de Corcira, Apolonia y Epidamos, y sus navíos iban a convertirse en la policía marítima del mar Adriático durante décadas.
Pero los romanos aun trataban de evitar conceder a Illiria el status de nueva provincia romana (como Sicilia ,Hispania, Cerdeña, etc) para no tener que guarnicionar la zona con tropas romanas. Segun el senado romano, era incompatible con la libertad de los griegos mantener allí tropas romanas de ocupación, y tanto Iliria como Macedonia debían tener el musculo militar suficiente para ocuparse de las hordas de barbaros del norte de los Balcanes.
Así, las 7 nuevas republicas en que se habían convertido Iliria y Macedonia iban a ser gobernadas por sus respectivos pueblos, pero solo bajo una estricta supervisión romana, respaldada por el envió de misiones diplomáticas constantes, informes de comerciantes y la pura amenaza de la fuerza.
Roma había concedido la libertad, y los macedonios e ilirios no debían olvidar que Roma tambien podía quitársela cuando lo deseara.
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