miércoles, 19 de junio de 2013

1877 : El ultimo samurai.La historia real (2ª parte ).






 Viene de aqui :
 
El 17 de febrero, Saigo presento sus respetos al daimyo del clan shimayu,al que debia obediencia.A continuación, partió hacia Kagoshima con su guardia personal. En su marcha hacia el norte, el ejercito de Saigo se vio duramente obstaculizado por las condiciones climatológicas.La nevada que caía sobre la región de Satsuma era la más fuerte en cincuenta años.

2 días mas tarde, el general Taketa Tami, comandante en jefe del castillo de Kumamoto, recibio una carta de Saigo, en la que le informaba que en breve su ejército pasaría cerca del castillo en son de paz, y le pedía instrucciones para no causar ningún tipo de alarma en la población.

 Castillo Kumamoto.

Pero el general Tani no tenía ninguna intención de permitir el paso del ejercito de Saigo.Disponia de 4.000 soldados y 600 policias,una fuerza paramilitar reclutada entre los samuráis, comparable a los gendarmes franceses o los carabineros italianos, que no solía utilizar armas de fuego, sino espadas.

Dado que la mayoría de la guarnición del castillo Kumamoto eran nativos de Kyushu y la mayoría de sus oficiales eran  nativos de Kagoshima, existía el claro riesgo de que desertaran y pasaran al bando de Saigo. Para evitarlo en lo posible, el general Tani decidió permanecer a la defensiva en el castillo. Reunió gran cantidad de avituallamiento y demolió centenares de casas alrededor del castillo, para tener mejores campos de tiro.

Aunque el castillo, construido en 1598 era uno de los más fuertes de japon, Saigo estaba convencido que su fuerza de 9.000 samuráis era muy superior a las fuerzas de Tani, compuestas básicamente por reclutas.

Tras rodear completamente el castillo el día 22,los rebeldes  lanzaron el primer asalto sobre el castillo, con el apoyo de unas cuantas piezas de artilleria. Rechazados por el fuego graneado de los defensores, los rebeldes samurái continuaban lanzándose al asalto de los muros una y otra vez.

 Asalto al castillo Kumamoto.

Tras dos días de asaltos infructuosos, los ánimos de los rebeldes empezaron a flaquear. Mientras una parte rodeaba el castillo  y trataba de matar de hambre a la guarnicion, varios destacamentos fueron enviados a bloquear los caminos que llegaban al castillo. Allí se encontraron con la vanguardia de las tropas de refuerzo enviadas por el gobierno central para auxiliar  al general Tani y sus tropas. Tras varios duros combates, los rebeldes se retiraron de la zona el día 26.

El día 3 de marzo, ambas fuerzas volvieron a encontrarse, sobre un frente de batalla al sur de la bahía de Ariake.

Aunque el príncipe Arisugawa era el comandante al mando de las fuerzas imperiales asignadas a terminar con la rebelión, el mando sobre el terreno correspondía al general Aritomo Yamagata.

 General Yamagata.

Nacido en Chosu, había estudiado en las más famosas academias militares de Europa y había sido nombrado ministro de la guerra en 1870.

Yamagata era un buen amigo de Saigo. Ambos creían en la necesidad de un gobierno y unas leyes autoritarias y compartían el deseo de una expansión militar hacia China, Corea y Manchuria.Pero, a diferencia de Saigo, Yamagata quería modernizar el ejército japonés, a imagen y semejanza del ejército prusiano.

Fue Yamagata quien ordeno el ataque frontal sobre las posiciones rebeldes, el día 4 de marzo, dando comienzo a la batalla de Tabaruzaka.

 Batalla de Tabaruzaka.

Con los dos bandos atrincherados, se inicio una guerra de posiciones en las que nadie pudo tomar ventaja. Debido a la falta de municion, el uso de armas de fuego fue muy escaso. 

Los ataques de uno y otro bando se producían a espada, y se defendían de igual forma.

Al octavo día de la batalla, las tropas imperiales habían logrado expulsar a los rebeldes de sus posiciones, a costa de 4.000 bajas, muertos o heridos en cada bando.

Saigo escribió una carta al príncipe Arisugawa, en las que volvía a repetir su intención de ir a Tokio a parlamentar con el emperador.insistia en que deseaba un arreglo pacífico de la cuestión.

Pero el gobierno se negó a negociar. Sus fabricas de munición producían ahora más de medio millón de cargas de munición al dia.El imperio japonés estaba preparado para una guerra total, y estaba determinado a ganarla.

Para cortar las líneas de comunicación de los rebeldes y separarlos de su base, las tropas imperiales desembarcaron en Kagoshima el 8 de marzo.Rapidamente, se hicieron con el control de los arsenales y tomaron al gobierno provincial bajo custodia.

Privados de avituallamiento desde su base en Kagoshima, los rebeldes se vieron obligados a subsistir a base de lo que conseguian  de los campesinos. Un líder disidente local, Kichijuro Ikebe, se unió a los rebeldes con sus 2.000 samuráis.

Mientras tanto, en el castillo Kumamoto se estaban acabando las provisiones.La escasez de munición era tal que se utilizaban los proyectiles de artillería disparados por los rebeldes que no habían estallado. Aunque ya no tenían que resistir los ataques frontales  de los días anteriores, los choques se limitaban a pequeñas escaramuzas y fuego de francotiradores.

El general Tani decidió organizar una salida de los defensores para tratar de conseguir alimentos e intentar contactar con las tropas de refuerzo, que estaba a pocos kilómetros.

En la noche del 8 de abril, 8 compañías de infantería al mando del mayor Sasukata Oku degollaron a los centinelas rebeldes, traspasaron la línea y mantuvieron  abierta una ruta para reabastecer el castillo.

El 14 de abril, las tropas imperiales iniciaron el ataque sobre los rebeldes , que se retiraron y pasaron a ocupar posiciones elevadas al este del castillo. Al día siguiente, las tropas imperiales liberaban el castillo de Kumamoto, tras 54 días de asedio.



No hay comentarios:

Publicar un comentario