martes, 23 de junio de 2015

87 a.c.: Mitridates (18ª parte) : La campaña en Grecia



Viene de aquí: 


   Mientras esperaba las noticias de Grecia,Mitridates no perdía ojo de lo que sucedía en Italia. Las legiones de la republica combatían contra los insurgentes italianos en el sur de la península italica, mientras en la propia ciudad Eterna estallaba la guerra civil entre los partidarios de Mario y los de Sila.


  Sila había sido elegido cónsul, y sus partidarios del partido de los optimates combatían en las calles de la ciudad con los partidarios populares de Mario.


  Con una fuerte inferioridad numerica en las calles,Sila se vio obligado a abandonar la ciudad, y decidió tomar el mando de una legión que combatía en el sur contra los rebeldes marsi.La diosa Cibeles se le apareció en sueños y le aseguro la victoria si atacaba directamente la capital. Así lo hizo Sila, que conquisto Roma tras numerosos enfrentamientos callejeros de los legionarios con los partidarios populares, que causaron gran cantidad de muertos.Sila emitió un edicto en el que ponía precio a la cabeza de Mario, pero gran parte de los romanos permanecieron leales al legendario general y le ocultaron.


  Por fin dueño de Roma, Sila se encontraba en una situación muy delicada.Los tesoros sagrados de los templos de Roma se habían malvendido al mejor postor para obtener financiación para las diversas guerras en las que Roma se encontraba inmersa. Sila necesitaba una victoria contra los enemigos exteriores de la republica para confirmar su estatus de cónsul y elevarlo al de héroe legendario. Pero tampoco podía tomar las legiones y abandonar Italia,ya  que seguramente caería en manos de sus enemigos populares.


  En el 87 a.c., ocurrió lo que Sila no deseaba que pasara bajo ninguna circunstancia. Lucio Cornelio Cina, uno de los mejores y más influyentes amigos de Mario, obtuvo el consulado, junto con  el optimate Cneo Octavio.


  En el verano  hizo su aparición el cometa Halley, un muy mal presagio para los romanos. Cina juro ante los dioses que no usaría su cargo para terminar con el partido optimate y los seguidores de Sila. Pero su juramento duro poco, y muy pronto, los seguidores de Mario volvían a  tomar las calles de la capital, poniendo en peligro las vidas de la esposa y los hijos de Sila.


  Mientras, Mitridates seguía con sus maquinaciones en contra de la republica. Estaba seguro que Roma intentaría vengar el asesinato de decenas de miles de sus ciudadanos en Anatolia durante las vísperas asiáticas. Pero también sabia que el caos en la republica le daría una cierta libertad de movimientos durante un tiempo. Pensaba que si conseguía arrebatar Grecia a los romanos, se verían obligados a aceptar el hecho consumado y se avendrían a una  nueva división de poder en el mediterraneo, respetando a Mitridates como el nuevo rey del nuevo imperio greco-persa.


  Al contrario que los romanos, para los ciudadanos del Ponto y el mismo rey Mitridates la aparicion del cometa Halley en los cielos era un excelente presagio. Sus generales Arquelao y Metrofanes aprovecharon tan buen presagio para invadir la isla de Delos, saqueando sus pueblos y quemando sus templos hasta los cimientos.Cientos de esclavos,subitamente liberados de las cadenas de sus amos romanos, se unieron a las tropas de Mitridates.

 Delos.


  La gran mayoría de los residentes romanos en la isla fueron asesinados, y los pocos que sobrevivieron fueron vendidos como esclavos.Metrofanes y Arquelao tomaron posesion del inmenso tesoro del templo de Apolo, almacenado allí durante siglos.


  Tradicionalmente, el tesoro de Apolo en Delos estaba bajo control de los atenienses.Como signo de buena voluntad y muestra de su interés en contar con los atenienses en su guerra por liberar Grecia,Mitridates decidió enviar el tesoro de Delos a Atenas,protegido por 2.000  de sus soldados.


  A su llegada a Atenas, los 2.000 soldados del Ponto se dedicaron a entrenar a las distintas milicias de las distintas ciudades de Grecia,ya que sus respectivos ejercitos  habían sido prácticamente desmantelados por los romanos en las anteriores décadas.


  Solo entonces, cuando Atenas disponía de suficientes fondos y tropas entrenadas, declaró la guerra  a la republica romana y anuncio su alianza con el rey Mitridates.Esparta y Tebas olvidaron su atávica enemistad con Atenas y se unieron a la alianza pontica, preparándose para recibir al ejercito liberador, el ejército del general Arquelao, formado mayoritariamente por galos de la provincia de Galacia.


  Arqueleo envió a Arcatio, el hijo de Mitridates ,y al general Taxilo con un fuerte contingente (100.000 de infantería y 10.000 de caballería ) a través de Tracia, en dirección a Anfipolis.Cuando llegaron  la ciudad, Macedonia también se puso de lado del rey del Ponto.La toma de Anfipolis tenía un gran significado estratégico, ya que a partir de entonces, Mitridates tendría una ruta maritima segura para enviar incesantemente suministros desde Anfipolis hasta el Pireo, el puerto de Atenas.


  Arquelao ya dominaba el sur y el centro de Grecia.Su siguiente movimiento fue ocupar el Atica, en donde se encontraba Atenas .Por su parte, Metrofanes tomo Eubea y el puerto de Calcis, mientras la armada póntica de Neptolemo navegaba por las costas de Tesalia, y el general Dorileo se encontraba en el ponto entrenando un refuerzo de 80.000 soldados mas.


  Todas las fuerzas debían converger en la frontera norte de Macedonia a finales del  verano del 87 a.c., Si todo iba según lo había planeado Mitridates, la guarnición romana allí acuartelada seria exterminada con facilidad, dejando el camino al norte expedito.


  Pero el comandante al mando de la guarnición romana en Macedonia,el pretor Cayo Sentio Saturnino, decidió tomar una estrategia agresiva y trato de enfrentarse por separado a las tropas de Mitridates antes de que se unieran sus diferentes contingentes.

 Envió a parte de sus tropas a obstaculizar el avance de la infanteria de Arcatio y Taxilo, y envió a su legado Quinto Brucio  Sura con una pequeña flota para encontrarse con la armada de Neptolemo.El combate naval fue netamente favorable a los navíos romanos, y Neptolemo tuvo que retirarse mientras los marinos romanos capturaban uno a uno a muchos de sus barcos, matando a todos sus tripulantes.


  Brucio persiguió a Neptolemo hasta Eubea, obligándole a dejar desprotegida su base en la isla de Skiatos, en donde se encontraba su depósito de provisiones y el hospital de los marinos de su flota.


  Brutio rodeo la isla y la capturo, junto con cientos de prisioneros y todas las provisiones de las que disponía Neptolemo para la flota pontica.


  El legado Brucio Sura había perdido a varios familiares en las Vísperas Asiáticas, y ansiaba venganza.Ordeno separar a los prisioneros en dos grupos: en un grupo, los hombres libres, y en el otro, los esclavos romanos que anteriormente se habían unido a Mitridates.


  Brucio anuncio la liberación de los hombres libres, pero antes ordeno que les fueran amputadas ambas manos, para que no volvieran a coger una espada o un escudo contra la republica romana. La suerte de los esclavos fue aun peor, ya que fueron crucificados a lo largo de toda la costa de la isla, para que cualquiera que pasara por allí  tomara nota de la suerte que esperaba a quien se rebelase contra el poder romano.

  Brucio se dirigió hacia Beocia, donde se le unieron unos pocos cientos de soldados de refuerzos enviados a toda prisa por el pretor Saturnino. Su intención era detener al contingente del general Arquelao y evitar que se dirigiera al norte de Grecia.


  Ambos ejércitos se encontraron en Queronea, la misma llanura en donde Filipo, el padre de Alejandro Magno, había derrotado a los griegos en el año 338 a.c.


(Continuara...)

2 comentarios:

  1. Arrgghhh...necesito que este relato continúe!!!!! jejeje Inmenso trabajo el expuesto en este lugar. Aquí tiene a un nuevo seguidor. Y no dude que el resto de relatos ocuparán parte de mi tiempo de ahora en adelante ;)

    ResponderEliminar
  2. Lo estoy leyendo,este blog es increible!

    ResponderEliminar