jueves, 12 de junio de 2025

PANZERMANN ; tanquistas, reclutamiento y formación ( 1ª parte ).

 

Michael Wittmann.

  Los nombres de  Michael Wittmann, Otto Carius, Kurt Knispel y muchos otros son  absolutamente conocidos por los seguidores y estudiosos del arma acorazada alemana de la 2ª guerra mundial. Junto a ellos, una plétora de soldados Panzerschüzen que permanecen desconocidos, pero que a menudo dominaron los campos de batalla. Pero… ¿ cómo llegaban a formar parte de las tripulaciones de los carros de combate? ¿ qué requisitos debían cumplir para ingresar en el arma acorazada ?¿ cuál era su entrenamiento ?

  Tras completar el RAD (Reichsarbeitsdienst, o "servicio de trabajo", que supervisaba a los jóvenes de 18 años antes de su reclutamiento), cada joven alemán esperaba la llegada de  un telegrama que le informaba del cuartel donde debía presentarse ante la junta de revisión (Musterung), que lo declararía apto o no apto para el servicio. El reclutamiento se realizaba a los veinte años, edad que se redujo gradualmente durante el conflicto, al igual que había ocurrido durante la Primera Guerra Mundial.

RAD,
 

  Si bien el reclutamiento se realizaba según el sistema de regiones militares (o Wehrkreise), es decir, con base territorial, el servicio en el arma acorazada constituía una excepción a esta regla, ya que los reclutas podían provenir de los más diversos orígenes, lo que no excluye ciertos patrones de reclutamiento específicos ( por ejemplo,la2.ª División Panzer estaba, compuesta en su mayoría por reclutas austriacos ).

 La llegada de voluntarios complementaba la posible transferencia a la Panzerwaffe de una parte del contingente anual de reclutas. Pero nunca hubo escasez de voluntarios para el arma acorazada. De hecho, la propaganda germana se esforzaba por destacar la élite de las formaciones de la Wehrmacht, y especialmente el servicio blindado, la rama más moderna del Heer ( ejército de tierra ), que en cierto modo puede describirse como élite, mientras que el 80% del ejército seguia siendo de infantería y caballería. 

 Para un joven recluta, surgía así la perspectiva de servir en un servicio muy publicitado y tecnológicamente avanzado de la época. Así, Otto Carius, soldado de infantería en 1940, respondió a la llamada de su comandante de compañía para que doce voluntarios se unieran al servicio blindado.

  Pero el atractivo de pertenecer al arma acorazada tenía muchas facetas. En una época en la que poseer un coche era solo posible para una minoría, aprender a conducir un Panzer era una experiencia particularmente emocionante. «Nunca había conducido un coche y me fascinó de inmediato la sola idea», relató Wilhelm Ludwig tras descubrir el placer de conducir una motocicleta y un Panzer, en el mismo dia.

  Los soldados de la Wehrmacht representaban así la primera generación de alemanes que sirvieron en grandes cantidades en unidades blindadas, ya que los vehículos blindados de transporte de personal solo habían sido una anécdota en el Ejército Imperial germano durante la Primera Guerra Mundial.

 La primera escuela Panzer , Kraftfahrkampftruppenschule Wünsdorf , cerca de Berlin,se fundó en noviembre de 1933. Además de probar nuevos equipos, allí se entrenaba a tanquistas, así como a soldados de otras ramas (equipos de cañones PaK ( antitanque ) Kradschützen ( infantería motorizada ) y personal de unidades de Aufklärung ( reconocimiento ). 

Manual para unidades de reconocimiento.  
 

  Uno de sus cuarteles satélite era la Schließlehrgang Putlos, la escuela de tiro para vehiculos blindados blindados, establecida en el mar Báltico. Proliferaron las escuelas Panzer, como Grafenwöhr, que se convertiría en una de las principales áreas de maniobra. El centro de entrenamiento de Paderborn era uno de los más famosos por sus vehículos blindados de transporte de personal. 

 

  La cooperación en armas combinadas, propia de la Wehrmacht, iba a recibir especial atención. La Escuela Panzer de Döberitz insistió en que los ejercicios se diseñaran y realizaran en colaboración con la infantería, la artillería, los ingenieros y la aviación.

  Los ejercicios tácticos ocupaban la mitad del tiempo. Tan pronto como era posible, en cualquier caso, dentro de las seis semanas posteriores al alistamiento,  los reclutas participaban en maniobras que involucraban a toda la división , utilizando diferentes armas. Estos ejercicios permitían que los aspirantes a tanquistas, lejos de estar confinados en un cuartel específico, se entrenaran en diversas áreas de maniobra (diferentes tipos e terreno, de climatología, etc. ).

 

  El diario personal de Kurt Knispel relata cómo fue el entrenamiento en Grafenwöhr en 1938, así como las dificultades de su regimiento durante el verano y el otoño de ese año, un ejemplo perfecto de los ejercicios de cooperación de armas combinadas promovidos al más alto nivel.

 "Domingo, limpieza de armas y servicios técnicos. El campamento es amplio y está bien equipado. El terreno es similar al de Brandeburgo. Lunes, en alerta. Por la tarde, iniciamos la marcha. La ruta tiene 40 km, atravesando un paisaje muy hermoso, similar al de Brandeburgo, pero con más colinas. Nuestro punto de encuentro es un denso bosque rocoso con hierba y arándanos.

 

 A ciegas y a veces sin luz. Buenos caminos y obstáculos. Nuestra tripulación conduce bien. Nuestros Panzers se mueven por todos lados. La artillería continúa disparando. A las 3:00 a. m. llegamos a la segunda posición. Los proyectiles de artillería caen a una distancia aproximada de un kilómetro. Amanece. No estamos desplegados. Por razones de seguridad, la artillería debe cambiar de posición. Un poco decepcionados y cansados, regresamos a Grafenwöhr, bordeando las posiciones de artillería. Polvo, calor, estamos sucios, pero de buen humor.

  El martes a las 2:15 a. m., nos dirigimos a la primera zona de concentración.

  Las posiciones de artillería están dispuestas en un vasto semicírculo a nuestro alrededor y abren fuego de nuevo. Un leve ruido revela que los proyectiles pasan por encima. Un globo cautivo se ve en el horizonte. 6 baterías participan en el ejercicio. El fuego de artillería avanza y el bosque se cubre de humo por las explosiones. La Brigada Panzer ataca. La metralla de artillería cae lejos de nosotros. Somos los segundos en movernos. Delante de nosotros está el II./Abt., y a la izquierda está el 7.º Regimiento Panzer. Al final del ejercicio, regresamos al campamento sucios, sedientos y sudando.

  Viernes, 1 de julio de 1938. Hoy realizamos ejercicios de tiro y nuestro tanque dispara bien.

 

  4 de julio de 1938. Dos horas de entrenamiento en la Abteilung. Casi 30 aldeas están aseguradas en el área de entrenamiento. A veces se experimenta una extraña sensación al entrar en una aldea así. Dejamos atrás campos y prados; Hay amapolas, manzanillas y acianos por todas partes. Nuestros Panzers dejan fácilmente su huella en estos campos coloridos. El Regimiento Panzer 8 entrena a sus tanquistas en Müsingen y Heuben, en Baden-Württemberg, donde el entrenamiento continúa durante una semana, Pero esta vez con la infantería. 

 El regimiento fue entonces destinado a Böblingen, donde, durante un mes, practicó conducción nocturna y desfile. Los trenes llevaron a la unidad a Bergen para otra semana de prácticas de tiro, antes de regresar a Böblingen”.

Practicando con "carros de combate", en la escuela de carros de comabte de Kama, en las cercanias de Kazan, Union Sovietica, en 1935.

 

(Continuara…)

lunes, 9 de junio de 2025

1808 ; Napoleon : 2ª guerra peninsular ( 10ª parte)

 


Viene de aquí:

  Habiendo superado Somosierra el 30 de noviembre, las tropas francesas no tenían ya ningún obstáculo para llegar a Madrid.

  Con el emperador frances a las puertas, el pueblo de Madrid ocupo las calles de la capital y exigió defender la ciudad. Aterrorizados por la intensidad del odio al frances del populacho, las autoridades decidieron crear una junta de defensa de la ciudad que debía obtener todas las armas que pudiera, además de ordenar la construcción de barricadas y fosos. Durante unas pocas horas, todo fue actividad.

  La capital presentaba un espectáculo grandioso.Hombres y mujeres de todas las edades corrían, unos para llevar ladrillos a las improvisadas barricadas, otros para  cavar fosos, transportar piedras, etc.  Solo hizo falta una peticion de  un oficial para que se comenzaran a lanzar desde las ventanas todo utensilio de cocina disponible y mantas de lana o algodón para hacer balas con ellas. Las ventanas se taparon con colchones, mientras las calles eran bloqueadas con muebles de todo tipo y tamaño.

  Pero eran solo gente del pueblo, y la mayoría de las defensas habían sido pobremente planeadas y peor ejecutadas. Tampoco se tomó ninguna medida para ocupar las colinas que rodeaban la ciudad. Los soldados disponibles para defender la ciudad estaban mal armados,y  tenían la típica propensión a desmandarse en cuanto perdian a su oficial al mando.

  Algunos de esos soldados lincharon a uno de los miembros de la Junta de Defensa,el marques de Perales, con el pretexto de que las cargas de mosquete que les habían entregado no tenían polvora,sino arena.

  La Junta Suprema Central envió peticiones de auxilio, pero los supervivientes de las batalla en Gamonal y Somosierra no estaban en condiciones de prestar ninguna ayuda, y las tropas del general Castaños se encontraban demasiado lejos para servir de ayuda. 

  El baño de sangre que se avecinaba se pudo librar gracias a que Napoleón no deseaba comprometer al rey José si no era necesario. Si podía obtener la rendición de la ciudad sin excesivo derramamiento de  sangre, quizás los madrileños y mas tarde el resto de españoles respetarían  algo más al rey francés.

 

  Napoleón ofreció a la junta términos de rendición aceptables, en repetidas ocasiones, pero la excitación el pueblo impidió que la junta  siquiera  pudiera valorar los términos.

  Tras varias escaramuzas en las calles de Madrid, el  3 de diciembre, como ultima opción antes de atacar, Napoleón ordeno una demostración de  su artillería contra la ciudad ( bombardeando parques vacíos ). El resultado no pudo ser mas predecible. La mayoría de los ciudadanos armados que debían defender las barricadas no se presentaron, y los que si lo hicieron no tardaron en marcharse a sus hogares.

"Bombardeo de Madrid, 4 de diciembre 1808", obra de Edme Bovinet,
 

 Napoleón se limitó a tomar las alturas que dominaban el Parque del Retiro, en el centro de la ciudad, y, al día siguiente, la Junta de Defensa capitulaba, aunque no antes de que las tropas regulares  que debían defender la ciudad marcharan hacia el sur.

  Ya que no se iba defender la ciudad, los ciudadanos comenzaron a desmantelar las barricadas, llevándose los muebles a sus hogares, y volvieron a pavimentar las calles con los adoquines previamente arrancados.

Parque del Retiro, con la fortaleza que Napoleon ordeno construir en el.
 

 Como era previsible, la caída de Madrid produjo un colapso generalizado de las tropas españolas en el centro de  la península. Lo que quedaba del ejercito del centro, que había perdido mas de la mitad de sus efectivos en la retirada desde Tudela, se encontraba el 2 de diciembre en Guadalajara.

  Su anterior jefe, el general Castaños, habia recibido la orden de marchar a Aranjuez para hacerse cargo del comité de generales que asesoraba a la Junta Central, asi que el mando lo tomo el general Manuel Lapeña, que intentó un movimiento para acercarse a la ciudad de Madrid y reconquistarla.

 

General Manuel Lapeña.

  Pero tras unos días de marcha, sin saber muy bien como habia llegado hasta allí, lo que quedaba del ejercito del centro apareció al sur de la capital. Sin saber qué hacer, el general Lapeña dirigio a sus hombres hacia Cuenca, donde fue apartado del mando, pasando este al duque del Infantado.

  Los restos del ejército del norte, en Segovia, marcharon hacia el sur, hacia Talavera de la Reina, en donde se reunieron con los contingentes que habían escapado de  Somosierra y Madrid.

  Los miembros de la Junta Central habian abandonado Aranjuez el 1 de diciembre, acompañados por no menos de  14.000 ciudadanos de Madrid que habían abandonado la ciudad. Marcharon en primer lugar hacia Extremadura, al oeste, y finalmente hacia el sur, hacia Sevilla, adonde llegaban el 17 de diciembre.

  En el camino, habían visto carros de transporte de munición abandonados, cañones destruidos, soldados vestidos con diferentes uniformes de distintos colores y de distintas unidades. Grupos de  entre 100 y 200 soldados desharrapados y desarmados, liderados por un sargento o un cabo, mientras grupos de media docenas de oficiales se hacía acompañar por sus sirvientes, que tiraban de  carros llenos de cerámica, ricos ropajes,etc.

  Pero el fracaso del ejercito del centro no iba a ser el único. En Cataluña, también los franceses habían pasado a la ofensiva.

  En agosto de  1808, los invasores habian pasado por serias dificultades en el noreste de la península, con la mitad de sus tropas bloqueadas en Barcelona y el resto atrapados en las cercanias de Figueres. Napoleón, cuando había planeado su contraataque, no se olvido de ellos.

  Se formaron  3 nuevas unidades a base de varias unidades del ejercito frances y de las repúblicas italianas aliadas. Así, más de 18.000 soldados de refuerzo llegaron al frente catalán, al mando del experimentado mariscal Gouvion Saint Cyr.

 

 Consciente de la dificultad de formar un nuevo ejército regular en Cataluña, donde el reclutamiento era odiado por razones históricas, la Junta Central ordeno el envío de una division de reciente  formación al  mando de Palafox y otra formada en Granada, a base de nuevas levas y contingentes de veteranos del ejercito de Castaños. Pero esas tropas aun iban a tardar en llegar a Cataluña. Y el desastre pendía sobre la cabeza de las tropas españolas en la region, lideradas por el  anteriormente capitán general de las islas Baleares, Juan Miguel de Vives.

 

  La ofensiva francesa comenzó en noviembre con un ataque sobre Rosas, cuyo excelente puerto era una base para los navios españoles . El asedio comenzó el 7 de diciembre, y la defensa fue formidable, hasta el 5 de de diciembre, cuando los ingenieros franceses lograron abrir brecha en las murallas y forzaron la rendición  de la guarnición.

"Asedio de Rosas y el castillo de  la Trinidad".
 

  El siguiente objetivo frances era la propia capital catalana, Barcelona, y el 11 de diciembre un nutrido contingente se puso en marcha hacia el sur. Marchando hacia Barcelona, Saint Cyr se arriesgaba a quedar rodeado, ya que los españoles tenían  una considerable ventaja numérica.

  Pero gran parte del ejercito español en Cataluña se quedó  de guarnicion en Barcelona, y apenas 10.000 soldados se enfrentaban a  los franceses en Cardedeu, el 16 de diciembre, siendo derrotados.

Batalla de Cardedeu.
 

  Otro contingente de cerca de 20.000 soldados españoles esperaba en la zona de Molins de Rei, protegidos por el rio Llobregat, pero al amanecer del 21 de diciembre fueron flanqueados y puestos en fuga, dejando atras todos sus cañones y provisiones.

  Así finalizaba la contraofensiva francesa en España. Madrid, Burgos, Santander y Bilbao habian sido reocupados, y los franceses habian conseguido importantes victorias en Gamonal, Espinosa, Tudela, Somosierra y Cardedeu. Los ejercitos del este y el oeste habian sido practicamente desmantelados, y el ejercito del centro había sido dividido en tres ( los supervivientes de Somosierra en Talavera, las divisiones  andaluzas de Castaños, en Cuenca, y las divisiones valencianas y el ejercito de reserva, en las cercanías de Zaragoza.

  Miles de soldados y milicianos españoles habian muerto , cientos de cañones  e incalculables cantidades de material habian caido en manos francesas. El nuevo gobierno español estaba en fuga,  y la población civil, obligada a combatir prácticamente en solitario en las ciudades, no tenia opción.

  Tan pronto como Madrid cayo en manos francesas, sus ejercitos se dirigieron hacia el sur y el oeste, para completar la ocupación de la península. Todo parecía perdido para los españoles, pero aun quedaba en la península ibérica un ejercito que no había sufrido ninguna derrota, y contaba prácticamente con todo su potencial.

  Desconocida su presencia para los franceses, el cuerpo expedicionario británico en España estaba preparado para entrar en acción. Y quería pasar a la ofensiva.


 

(Continuara…)