Viene de aquí:
Los primeros momentos del ataque romano fueron bastante erráticos, y pronto pareció que podía finalizar en desastre. Los soldados de Lucio Valerio Flaco no conseguían romper las defensas etolias, y las tropas de Marco Pocio Catón ni siquiera eran capaces de encontrar al enemigo, ya que el guía que llevaban se perdió.
Tras horas caminando en círculo en la oscuridad, los hombres de Catón estaban agotados y desencantados.
Finalmente, el propio Catón y uno de sus oficiales lograron encontrar personalmente el camino, y además, en la oscuridad, el ruido del combate del grueso del ejercito romano intentado de nuevo el asalto frontal le guió en la dirección correcta. Catón y sus 2.000 soldados cayeron sobre los 600 etolios que protegian la retaguardia de la posicion defensiva seleucida.
En esos mismos momentos, el rey Antíoco recibió el impacto de una piedra en la mandibula,seguramente lanzada por uno de los soldados de Caton que combatían en las colinas. Con su general distraído por la herida y los soldados romanos presionando por los flancos, el ejercito seleucida se disolvió y huyo, perseguido por los entusiastas soldados romanos.
Tetradracma de plata del rey Antioco II "Antiochus Basileus" |
Entonces, los estrechos pasos que anteriormente habían evitado que los romanos pudieran desplegarse para atacar con más facilidad se convirtieron en un impedimento para los seleucidas en huida, sobre todo para los elefantes, que obstinados, bloquearon algunas de las salidas existentes.El pánico y el caos consiguiente terminaron con cualquier intento de resistencia por parte de seleucidas y etolios.
La caballería romana persiguió a los seleucidas, llegando hasta Scarpehia, a quince kilómetros de las Termopilas.Aparte de 500 hombres que habían acompañado a su rey en su retirada, el ejercito seleucida en Grecia había dejado de existir.
Antíoco se detuvo momentáneamente en Elatea, en donde se dio cuenta que su campaña en Grecia tenia pocas esperanzas de proseguir con éxito.La pérdida de 10.000 de sus hombres era un golpe muy duro, pero Antíoco podía reunir rápidamente un ejercito de 100.000.Pero esos hombres estaban en Asia Menor, y Antíoco no tenia en Grecia posibilidad de montar alguna operación para proteger su retaguardia y esperar la llegada de refuerzos.
Los romanos se apresuraron a intentar cortar la retirada de Antíoco, y el seleucida hizo lo único que podía hacer. Se detuvo momentáneamente en Calcis para recoger a su flamante nueva esposa, tomo un barco y cruzó el mar Egeo hasta llegar a Éfeso.
Con un magnifico sentido de la oportunidad, los etolios intentaron aprovechar que los romanos estaban ocupándose de los seleucidas para atacar e intentar saquear el campamento romano .Pero los romanos regresaron pronto a su campamento, y los etolios se vieron obligados a retroceder.
Durante las semanas siguientes,Focis, Locris y Beotia cayeron bajo control romano, sin lucha.
Los aqueos también querían aprovechar la ocasión y convocaron al ejercito de la liga Aquea para comenzar las operaciones contra los etolios. Al mismo tiempo ,el macedonio Filipo comenzaba a presionar sobre las posesiones etolias en Tesalia.
Con Antíoco fuera de Grecia, 20.000 soldados romanos y sus aliados iban a pasar el resto del verano tratando de eliminar por completo al único enemigo que aun les quedaba en Grecia, Etolia.
Los romanos decidieron que iban a comenzar su ofensiva contra Etolia atacando la ciudad de Heraclea, en donde se habían refugiado los etolios que habían intentado atacar el campamento romano.
El asedio de Heraclea fue largo y costoso, no tanto porque las tropas romanas no fueran capaces de tomar la ciudad, sino por la rivalidad de los oficiales del cónsul Glabrio; Marco Baebio, Apio Claudio y Tiberio Sempronio Graco (padre), compitiendo cada uno de ellos con los demás por obtener la gloria individual (Catón había sido enviado a Roma para dar cuenta al senado de la victoria en las Termopilas).
Glabrio sugirió a los macedonios atacar la cercana ciudad de Lamia.La posición geográfica de Heraclea, en la ladera norte del monte Oetia, permitía que ambas ciudades asediadas tuvieran vista directa sobre lo que ocurría en la otra. La idea del cónsul Glabrio era que, si una de las ciudades caia , la otra se rendiria al verlo.
Lamia y Heraclea. |
Los romanos usaron su maquinaria de asedio y sus arietes, mientras Filipo usaba su táctica de asedio favorita, el minado de las murallas enemigas. Pero la piedra con la que se habían construido las murallas de Lamia fue más resistente que los dfensores etolios de Heraclea.
Heraclea se rindió, y el cónsul Glabrio ordenó a Filipo abandonar el asedio de Lamia. Cuando los macedonios se marcharon, Lamia se rindió a los romanos, como Glabrio había previsto.
Se abrieron negociaciones para forzar a los etolios a una rendición general, pero
fracasaron, ya que los romanos exigieron la entrega del traidor Aminandro, que aun tenia gran predicamento entre las clases altas de Etolia.
Así que Glabrio movió sus tropas hacia Naupacto,para poner la ciudad bajo asedio.
Naupacto - Lepanto. |
Etolia envió a varios mensajeros para intentar convencer a Antíoco a volver a la guerra en Grecia.Pero Antioco no estaba aun preparado para volver a Grecia con un ejercito competente, así que expreso su simpatía por la causa etolia, prometió una considerable cantidad de oro para ayudar a los etolios, y los envió de vuelta a Grecia.
Los mensajeros volvieron a Etolia con las poco satisfactorias respuestas del rey Antíoco a sus peticiones.El senado de la ciudad decidio entonces enviar más mensajeros, esta vez a parlamentar con el mismo rey Filipo V.
Ante el desconcierto de los enviados etolios, el rey Filipo los trato con toda educación, como si fueran sus invitados. Pero cuando comenzó la negociación, Filipo culpó a Etolia del hecho de que romanos y seleucidas hubiesen llegado a Grecia para conquistarla.
Al igual que a Antioco, a Filipo también le convenía que los etolios continuaran combatiendo a los romanos. Mientras lo hacían, los macedonios se habían apoderado de buena parte de Tesalia y el norte de Grecia.
Con los romanos acampados ante las murallas de Nauoacto, el rey macedonio se disponía a apoderarse de Larissa y las fortalezas de Dolopia y Demetrias.
Restos de la ciudadela de Dolopia. |
La victoria romana en las Termopilas parecía haber beneficiado a los macedonios antes que a los propios romanos.Flaminino, que había vuelto a Grecia y se había unido al cónsul Glabrio se percató de la situación, y se dispuso a revertirla.
La liga Aquea, que se había comprometido con los romanos para atacar diversas ciudades de Etolia, se habían vuelto hacia el Peloponeso, esperando sacar partido del vacío de poder. El ejercito aqueo se encontraba asediando Messene (actual Mavromati) , una ciudad independiente que se había negado a formar parte de la liga Aquea.
Flaminino exigió a los aqueos que levantaran el asedio y se marcharan con su ejército, y a continuación negocio la entrada de Messene en la liga.
Ruinas del teatro griego de Messene. |
Flaminino también “escamoteo” de manos aqueas la isla de Zakyntos (actual Zante ).Dijo a los aqueos que el mar, dominado por la flota romana, rodeaba sus tierras, como el caparazón rodeaba a una tortuga. Y, como una tortuga, si sacaba la cabeza del caparazón se arriesgaban a que se la cortaran.
Era una amenaza clara,y los aqueos accedieron a las “peticiones” de Flaminino, lo que indicaba que algo había cambiado en Grecia, ya que apenas un par de décadas atrás, la liga Aquea se habría negado a devolver Zakyntos a Roma, sobre todo teniendo en cuenta que la habían conseguido sin lucha, simplemente sobornando al gobernador de la isla.
Mientras, el cónsul Glabrio veía que la guerra con los etolios estaba gastando tiempo y soldados de Roma, soldados que quizás podría necesitar poco más tarde para enfrentarse de nuevo a los seleucidas, así que se dispuso a intentar un acuerdo pacífico con Etolia, garantizando una tregua temporal en primera instancia y el envió de una delegación etolia a Roma para presentar su caso ante el senado.
Isla de Zakyntos - Zante. |
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