A la muerte de Alejandro Magno en
el año 323 a.c., su imperio, el más grande y extenso de la antigüedad, fue
repartido entre sus generales, los diadocos, que combatieron entre ellos durante
décadas,logrando debilitar seriamente el antaño invencible ejercito macedonio.
Esta debilidad macedonia permitió
a los celtas intentar la invasión de los
Balcanes, en el año 279 a.c.
Dos décadas antes, en el año 298
a.c., el jefe guerrero Cimbaules y sus
guerreros galos habían probado la fuerza de los macedonios, siendo rechazados
por las milicias y mercenarios
contratados por la oligarquía macedonia.
Un segundo intento más serio fue
llevado a cabo por Bolgius, otro líder guerrero ,en el año 281 a.c.
Nada más poner el pie en territorio
macedonio, los celtas se encontraron con un ejercito bajo el mando de Tolomeo Cerauno,
rey de Macedonia, llegado al trono tras asesinar a Seleuco Nicator, el fundador
del imperio seleucida.
Tras ser derrotado, Tolomeo tuvo
el dudoso honor de ser el primer gobernante griego en morir bajo las espadas celtas,
y su cabeza fue paseada por toda la región en lo alto de una pica.
Había cometido el error de
menospreciar a los guerreros celtas y de rechazar la ayuda que le ofreció una
tribu tracia, los dardani.Sintiendose despreciados y con pocas opciones de
sobrevivir a la incursión celta, decidieron entonces ofrecer sus servicios a los
invasores, que lo aceptaron sin dudar.
Tras la victoria, los celtas prefirieron
dedicarse a su ocupación habitual en territorio enemigo, el saqueo, y no
siguieron presionando para terminar con los macedonios.
La siguiente embestida celta
llego en el 279 a.c.,con el liderato de los jefes Achichorius y Breno,que al mando
de un enorme ejercito compuesto de
50.000 guerreros a pie y 15.000 a
caballo entraron en Macedonia desde Panonia (actual este de Austria y oeste de Hungria,aprox.).
Una parte de este ejercito
celta (unos 20.000 guerreros aprox.) deserto cuando transitaba por Iliria y se dirigió a Tracia, liderados por los jefes Lutario y Leonorio.Con la ayuda de varias tribus tracias, llegaron a la
costa de la propontide (actual mar de Marmara).El rey de Bitinia, Nicomedes,
les ayudo a cruzar el estrecho del Bosforo, para ayudarle en su disputa con el rey de Pergamo, Atalo I.
Tras una serie de escaramuzas, los
celtas fueron derrotados y obligados a desplazarse hacia el este, hacia el
interior de Asia menor, donde crearon el reino de los galatas, Galacia.
Esta deserción masiva no detuvo a Breno, que recibió refuerzos desde la Galia y desde Iliria,incrementando sus tropas
hasta los 150.000 guerreros a pie y 60.000 a caballo.
La resistencia macedonio corrió a
cargo de Sóstenes , un general macedonio de
poco éxito militar, que utilizando táctica de guerrillas consiguió obligar a Breno a dejar una fuerte guarnición en Macedonia, para dirigirse hacia el santuario
de Delfos, el verdadero objetivo de la incursión celta. En todo el mundo
conocido se sabía de la enormidad del tesoro que se guardaba en Delfos, y los
celtas no iban a perder esa oportunidad de hacerse con él.
Santuario Delfos.
Varios estados griegos se unieron
en una alianza para repeler a los invasores, incluyendo Atenas, Etolia, Foecia, Megara, etc.Pusieron al mando al general ateniense Callippus, que contaba con
alrededor de 40.000 soldados, mayoritariamente infantería.
Los diversos contingentes de tropas
griegas se reunieron, otra vez, en el paso de las Termopilas, paso obligado
para las tropas celtas para adentrarse en Grecia y dirigirse a Delfos.
Lo primero que hizo Callippus fue
enviar un contingente de caballería al rio Spercheius, para destruir los puentes
y detener momentáneamente a los celtas,
que se aproximaban desde la zona de Magnesia y Ftiótide (una región del centro de Grecia).
Pero Breno no quería esperar, y
mando a 10.000 de sus celtas (los que sabían nadar) a cruzar el rio. La caballería
griega opto por retirarse sin oponer resistencia .
Breno obligo a los habitantes de la zona a reconstruir los puentes, y la totalidad del ejército celta lo cruzo
rápidamente.
En poco tiempo, las hordas de celtas
asaltaban una y otra vez las posiciones de los griegos en las Termopilas,
siendo rechazados una y otra vez.
Sufriendo graves pérdidas, Breno
decidió enviar su caballería (inútil en el estrecho paso de las Termopilas) a Etolia, esperando que el fuerte contingente etolio que formaba parte de las
tropas griegas lo abandonara y se dirigiera a tratar de defender sus
posesiones.
Así ocurrio, y con el ejército
griego divididó en dos, Breno se puso a buscar el paso por las montañas que los
persas de Jerjes habían utilizado en el año 480 a.c. para rodear a los espartanos de Leónidas.
También Breno tuvo éxito, y
encontró el paso que los persas habían usado, un camino a través del monte Oeta,
al oeste de las Termopilas.
Tras observar como el contingente
etolio abandonaba las termopilas, envió a 40.000 de sus guerreros al paso del
monte Oeta, guardado por unos cientos de foceos.
La niebla impidió que los
foceos avistaran a los celtas hasta que
estuvieron prácticamente encima. Cuando se dieron cuenta, cualquiere
resistencia era inutil, asi que optaron por retirarse, dejando el paso en manos
de los celtas.
Los celtas se dirigieron a rodear a
los griegos, pero estos tuvieron más suerte (y previsión) que los espartanos
siglos antes.
Avisados por los foceos de la
proximidad de los celtas, los atenienses llamaron en su ayuda a la flota ateniense, estacionada en el golfo
de Malia.Todos los contingentes griegos fueron evacuados. Pero ya no tendrían
ningún tipo de influencia sobre los sucesos que seguirían a continuación.
( Continuara...)
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