Viene de aquí:
La aparicion de distintos grupos de “barbaros” en el este de
la Galia a mediados del año 406 causo el pánico entre las legiones romanas
acuarteladas en Britania. Se amotinaron, y en un corto espacio de tiempo proclamaron
emperador a tres de sus soldados ; Marco, Graciano y por último, Constantino
(no confundir con los emperadores bizantinos del mismo nombre ),que fue aclamado
por las tropas como emperador en febrero del año 407.Rapidamente,la atención del
usurpador Constantino III se dirigió al continente, ya que el día de Año Nuevo de
407 un enorme grupo humano compuesto de alanos, vándalos y suevos habían cruzado el Rhin y se internaban en la Galia, dirigiéndose hacia el puerto de
Gesoriacum-Bononia (actual Boulogne Sur Mer ) ,vital para el mantenimiento de las tropas del imperio romano en Britania.
El primer movimiento del usurpador Constantino
fue tratar de consolidar su poder en la Galia,instalando su capital en Lyon.A
mediados de verano,Estilicon,el magister militum del emperador Honorio , envió a un ejército imperial casi totalmente
formado por godos para evitar que el británico Constantino consolidara su poder en el continente.
Al mando del ejército imperial se
encontraba el general Sarus, un godo hermano del rey Sigerico, que consiguió derrotar
a los generales de Constantino, Justiniano y Nebiogasto.Puso sitio a la ciudad de Valence, en las cercanías de los Alpes., en donde se había refugiado el usurpador Constantino,
y solo la aparición de poderosos refuerzos llegados desde Britania al mando del general Geroncio obligaron a las tropas de Sarus
a retirarse hacia Italia.
Muy pronto, Constantino envió a
sus propias tropas para controlar los pasos de los Alpes, que comunicaban Italia, regida por el emperador Honorio y sus propios dominios en la Galia.
Para tratar de negociar un
acuerdo con el emperador Honorio y repartirse el imperio entre ambos,
Constantino decidió consolidar su posición en las provincias occidentales. A
finales del año 408, sacó a su hijo Constante del monasterio en donde se encontraba,
lo nombro cesar y lo envió a Hispania
junto con el general Geroncio y su ejército.
En Hispania se encontraba un numeroso
grupo de familiares del emperador Honorio,
y la mayoría de la nobleza local también apoyaba al emperador.
Las tropas del general Geroncio
derrotaron y pusieron en fuga a las tropas imperiales en dos batallas ; una en
el norte, en las cercanías del actual Logroño, y la otra cerca de Emérita Augusta,
en Lusitania.Tras sus victorias, Constante colocó su capital en Cesaraugusta,
mientras su padre Constantino ponía su atención en Italia.
Solido de oro acuñado por Constantino III.
Mientras las diversas facciones
romanas luchaban por el poder en el sur de europa,los diferentes grupos barbaros
aprovechaban para saquear el norte de la Galia casi con total impunidad. Parece
que Constantino no consideraba a estos grupos de “barbaros” una amenaza seria,
y por medio de tratados, sobornos y una presencia militar vigilante pero poco activa
consiguió mantenerlos momentáneamente en el norte de la Galia, evitando que se desplazaran hacia
el sur, hacia la zona más rica y poblada, aunque las ricas Remi (Reims),Ambiani
(Amiens ) y Argentorate (Estrasburgo) fueron saqueadas varias veces y sus habitantes
masacrados.
A mediados del año 409, los
problemas empezaron a acumularsele a Constantino.
Sus intentos para ser reconocido por el emperador Honorio como cesar de la Galia
y Britania fueron rechazados por los más altos oficiales del ejército romano,
que veían a Constantino como una seria
amenaza contra sus intereses particulares. Y en Hispania, el general Geroncio se levantó en armas contra su antiguo líder y proclamó como augusto y cesar de Hispania a Máximo,
uno de sus oficiales.
Poco después, el ejército imperial,
al mando del general Constancio (futuro
emperador Constancio III ) ,derrotó al ejercito del usurpador Constantino, que
fue capturado y ejecutado a mediados del año 411.A continuación, el ejército
imperial se dirigió hacia Arles, en donde se encontraba acuartelado el ejercito
de Geroncio.Ante la superioridad del ejercito imperial,las tropas de Geroncio
desertaron en masa, y Geroncio huyó a Hispania, en donde antes de ser capturado
se suicidó.La Galia pasó de nuevo a control del emperador Honorio.
Aprovechando el caos imperante en
la Galia en aquellos años, los vándalos, suevos y alanos decidieron abandonar
el norte de la Galia y se dirigieron hacia Aquitania, y desde allí, a los Pirineos.A finales de septiembre del año 409 irrumpian en Hispania.
Desde principios del siglo IV,
los caminos que atravesaban los Pirineos y que facilitaban el transporte de grandes cantidades de trigo desde los campos
de cereales del sur de Hispania y minerales desde el sudoeste hasta la península
itálica y el Rhin habían sido fortificados. Pero las pequeñas fortalezas que
jalonaban los caminos habían sido construidas para detener y suprimir a los bandidos, no para prevenir y evitar
una invasión masiva.
A principios de siglo, los encargados de la defensa de las fortalezas del Pirineo eran tropas locales que dependían de los aristócratas a quienes el imperio les había encomendado tal misión. Pero tras la victoria de Geroncio, las tropas locales fueron sustituidas por una unidad de mercenarios “barbaros” denominada Honoriaci, compuesta de britones, germanos y suevos.
Fortificacion romana en el Col de Panissars.A la izquierda,hacia la Galia,a la derecha,hacia Hispania.
A principios de siglo, los encargados de la defensa de las fortalezas del Pirineo eran tropas locales que dependían de los aristócratas a quienes el imperio les había encomendado tal misión. Pero tras la victoria de Geroncio, las tropas locales fueron sustituidas por una unidad de mercenarios “barbaros” denominada Honoriaci, compuesta de britones, germanos y suevos.
Seguramente fue la deserción masiva de los Honoriaci de sus puestos en los Pirineos lo que permitió la entrada masiva de los vándalos, los suevos y los
alanos en Hispania. Anteriormente ya habían desertado en varias ocasiones para
saquear el Campi Pallentini,la zona agrícola alrededor de la ciudad de Palencia,
y más tarde se unieron a vándalos y alanos en la devastación de buena parte de Hispania.
Los dos años que siguieron a la llegada de los vándalos a la península
ibérica fueron de una enorme devastación y sufrimiento para los hispanos,
agravado todo ello por el hambre causado por unas malas cosechas.Hidatio de Lemica, un cronista hispano, contemporáneo de la lelgada de los barbaros, lo narra asi en sus “Idatii
Episcopi Chronicon”:
“los barbaros corrieron salvajes
por Hispania, y su pestilencia mortal continuo su curso salvaje.La riqueza y
los bienes almacenados en las ciudades fueron saqueadas y consumidas por los
soldados.El hambre se desboco e impulsaba a los seres humanos a consumir carne
humana…….las bestias salvajes se habituaron a
consumir los cadáveres de los muertos por la espada, el hambre y la
enfermedad…..Y asi,con las cuatro plagas : la espada, el hambre, la enfermedad
y las fieras rabiosas, los presagios que los profetas del señor habían anunciado,
se cumplieron”.
Hidatio escribe que la mayoría de
las más grandes ciudades de la península se salvaron del asalto de los
barbaros gracias a las fortificaciones que habían construido el siglo anterior.
Eso significó que la administración romana aun seguía en pie, y los
recaudadores de impuestos romanos continuaron con su trabajo, manteniendo la administración.
Cuando termino el asalto barbaro, la administración romana volvió a funcionar
en toda la peninsula, y en los siguientes 4 o 5 años se vivio un periodo de relativa
prosperidad.
En el año 412, lo peor de la crisis había pasado.El general Constancio, tras terminar con la rebelión en la Galia había
ganado un gran prestigio militar. Seguramente intimidados por el nuevo poder
que había surgido en la Galia, los pueblos que habían entrado en Hispania y la
habían saqueado decidieron dar por terminada la destrucción y repartirse lo que quedaba en
pie.
Que bueno, muy buena info y súper guay el tema y las fuentes
ResponderEliminar