1241 : Batalla de Liegnitz.

 En diciembre de 1237,un ejercito  mongol liderado por el nieto de Genghis Kahn,Batu kahn cayo por sorpresa sobre la ciudad de Riazan,ocupándola tras un asedio de 5 dias.El ejercito mongol había aprovechado a la perfección las condiciones climatológicas, atravesando rápidamente los ríos helados y los pantanos con una gruesa capa de hielo.

Al mismo tiempo, otro ejercito mongol comandado por el jefe militar de Batu Khan, Subotai ,entro en el suroeste de Rusia, tomando Kiev.

La nobleza rusa, bajo el mando de Alexander Nevsky, logro repeler los asaltos mongoles contra Nóvgorod y Pskov, pero estos éxitos no pudieron cambiar el rumbo de los acontecimientos.

Con el reino de Kiev destruido y el sur de Rusia ocupado por la horda dorada mongola, los principados del norte de Rusia se vieron obligados a someterse al poder mongol y se convirtieron en estados vasallos.

Rusia continuo bajo control mongol durante los siguientes doscientos años, aunque se le permitió seguir practicando su religión.

Tras ocupar Rusia, la intención de Batu Khan era seguir extendiendo la conquista hacia el oeste, en un ataque con tres frentes contra Polonia, Hungria y Rumania.

En polonia, el ejercito norte bajo el mando de Baidar y Kadan saquearon y quemaron Krakow el domingo de ramos de 1241.Sobrepasaron Breslau y se dirigieron hacia la ciudad de Liegnitz, donde Enrique II,duque de Silesia ,había reunido un formidable ejercito compuesto básicamente de militia christi (caballeros teutónicos, templarios y hospitalarios) y caballeros polacos y germanos, para tratar de cerrar el paso hacia el sacro imperio romano.

Desde hacía un siglo, los nobles católicos germanos se habían expandido desde el sacro imperio romano hacia el norte y el este, a menudo a expensas de los señores feudales eslavos.

Las ganancias militares germanas se consolidaban con la masiva emigración de paisanos germanos, que se asentaban en numerosas ladeas campesinas.Consecuentemente, las regiones al este de Germania y al oeste de Polonia habían pasado a pertenecer al bando católico.

Encabezando esta campaña expansiva se encontraban las órdenes militares, lideradas por los caballeros teutónicos, con base en Prusia. No tenían tanta influencia como templarios u hospitalarios, y el objetivo principal de la orden era extender el catolicismo entre los paganos y los ortodoxos de Centroeuropa y los estados bálticos.

Bien entrenados, bien armados, espada, lanza, largos escudos, cotas de malla, las órdenes militares eran las tropas de elite de la cristiandad. Construyeron numerosos castillos en la zona, que les servían como base de partida para dominar el campo y realizar devastadores ataques anuales contra milicias de infantería superiores en número pero muy inferiores en capacidad táctica.

Los mongoles iban a poner a prueba la capacidad militar de las órdenes militares.

El 9 de abril de 1241, el duque Enrique II salió de Leignitz al encuentro de los mongoles (también llamados tártaros).Mientras cabalgaba por las calles de la ciudad, una piedra se desprendió del techo de la iglesia de Santa María y estuvo a punto de matar al duque. No era un buen presagio.

Se dirigió a una amplia llanura al sur de Liegnitz, un lugar llamado Walstadt, al mando de una tropa de unos 25.000 soldados, compuesto de caballeros polacos, caballeros teutónicos, templarios franceses y un contingente de soldados a pie.

Enrique II había tenido serias dudas si salir a combatir a campo abierto o permanecer dentro de la ciudad , esperando un fuerte refuerzo de 50.000 hombres al mando del rey Wenceslao de Bohemia.

Pero Enrique II no sabía cuando iba a llegar el refuerzo, y al recibir noticias de que se acercaba otro ejército mongol decidió salir de la protección de las murallas para evitar que ambos ejército mongoles se unieran.

Cuando el ejército de enrique II llego a Waldstadt, los mongoles ya estaban allí. El duque dispuso sus fuerzas en cuatro grupos, uno detrás de otro,con la caballeria delante y la infanteria detras. El primer grupo cargo contra los mongoles, pero estos tenían caballos más pequeños y más veloces, que les permitió rodear  a los atacantes y asetearlos con sus flechas. Al comprobar que no tenían el apoyo de los otros grupos, interrumpieron su ataque y se retiraron a sus líneas.

Los grupos segundo y tercero iniciaron su ataque conjuntamente, y parecieron tener éxito, los mongoles iniciaron lo que parecía una retirada desordenada.La caballería cristiana continúo presionando, persiguiendo a la caballería tártara por el campo de batalla.

Pero las cosas no eran lo que parecían  a los caballeros cristianos. Estaban siendo víctimas de la táctica  de los mongoles, la retirada fingida. Cuando las líneas de los caballeros se extendieron  y quedaron completamente separados de su propia infantería, la caballería pesada tártara dio la vuelta y cargo sobre los flancos de la caballería cristiana. A la vez, la caballería ligera tártara comenzó a disparar de nuevo, esta vez sobre los caballos, mucho menos protegidos que los caballeros que los montaban. Y los caballeros desmontados eran presa fácil para las lanzas de la caballería pesada tártara.

Para confundir aun mas al ejército cristiano, los mongoles provocaron una pantalla de humo entre la caballería y la infantería cristiana, que no podían verse unos a otros.Los mongoles lanzaron el asalto final contra los caballeros y prácticamente los aniquilaron.

El duque Enrique intento huir del campo de batalla con tres de sus escoltas. Uno a uno, sus escoltas cayeron bajo las flechas tartaras.El duque reventó a su caballo e intento seguir la huida a pie, pero fue capturado, asesinado y decapitado. Y el día termino con la cabeza del duque en lo alto de una lanzaa, siendo paseada alrededor de las murallas de Liegnitz.

La gran matoria de los caballeros de las órdenes militares, la aristocracia polaca y la nobleza del norte de Europa yacía muerta en Waldstadt.

De acuerdo con la costumbre mongola, fue cortada una oreja de cada uno de los muertos,para hacer un adecuado recuento de las bajas.Los mongoles llenaron 9 sacos de orejas. Alrededor de 23.000 hombres del duque enrique habían muerto.

El Gran maestre de los templarios escribió sobre el suceso al rey de francia, Luis IX, afirmando que no había ningún ejercito cristiano importante entre los mongoles y Francia.Pero al enterarse de lo ocurrido en Liegnitz, Wenceslao de Bohemia se retiro a una posición defensiva, colocándose entre los mongoles y Francia.

Mientras tanto, en el sur, Subotai había traspasado los pases montañosos de los Cárpatos y se adentraba en Hungria, recorriendo 60 kilómetros al día por la nieve.